02

4 1 0
                                    

¿Qué se siente estar enamorado? Aquella pregunta invadía la mente de un chico rubio con labios y mejillas regordetas.

¿Qué es el amor? ¿Qué se siente estar enamorado? ¿Por qué aún no ha encontrado a la persona correcta?

JiMin tenía ese tipo de preguntas tan repentinamente, y que le dolía no poder responderlas. ¿Eso era bueno o era malo?

Claro, antes ya había tenido una pareja, pero realmente no ha estado enamorado. Simplemente le gustaba. Y eso no era suficiente.

Por el contrario de YoonGi, quien no quería saber más sobre el amor, JiMin estaba en busca de la experimentación de ese sentimiento.

Quizás lo encontraría en el lugar menos esperado. Ciertamente, no tenía idea.

Últimamente, ha estado muy agotado pues se encuentra estudiando su carrera en danza contemporánea.

Hace unos días, estaba por llegar más tarde de lo normal a una de sus clases. Ir en bicicleta era, de cierto modo, malo.

Aunque, probablemente, lo malo era que siempre salía tarde de su casa. Sólo que no lo acepta.

Y, para colmo, ese día estaba por atropellar a dos personas con su bicicleta de lo rápido que iba; un señor que estaba por cruzar la calle y un chico de piel pálida, quizás de su misma edad.

Afortunadamente no pasó nada, pero al otro chico se le notaba furioso. Aunque, el rubio no tuvo tiempo para más pues estaba demasiado atrasado para llegar a sus clases.

Se le olvidó la libreta, lo que significaba terror ya que, ese día, tendría clases teóricas; si no apuntaba nada, era un cero seguro en la próxima clase.

Y, para terminar su mal día, el trabajo en equipo se hizo presente. Realmente, no era malo hacer ese tipo de trabajos; lo malo era que esa vez irían a su casa.

Al día siguiente, tendría que armar una coreografía en grupo y, como el inicio del trabajo sería en su casa espaciosa, necesitaba tener algo para ofrecerles a sus invitados no tan invitados.

Algo económico; ramen.

Algo instantáneo, prácticamente; ramen.

Algo que encuentra rápido y cerca del lugar en donde se encuentre; ramen.

Está entendido que todo lo que pensaba le daba como resultado "ramen". Por ende, decidió hacerse caso y comprarlo.

—Una caja de ramen, por favor.

Cuando pronunció aquellas palabras, la persona que estaba detrás de él parecía tener un semblante, de cierto modo, burlesco.

Pero, cuando le entregaron aquella caja con numerosos empaques del producto, el chico detrás de él se había exaltado al ver eso.

No tenía idea de porqué, lo único que pasaba por su mente era que tendría visitas en su casa y que necesitaba irse urgentemente.

Y por supuesto; “ese chico se me hace conocido”, era el pensamiento que merodeaba por su cabeza.

Por otro lado, YoonGi miraba sorprendido a la persona frente suyo, desesperado por comprar su antojo.

Desafortunadamente, toda su emoción se acabó cuando vio al rubio frente a él irse alegremente y saber que no quedaba ramen.

[I]«Rayos, ¿en serio eso puede suceder?» pensó enojado e indignado.

Al parecer sí, eso puede pasar. De hecho, recién había sucedido; se acabó el ramen.

Ladrón de AlmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora