Ganar perdiendo | Tom Holland

CAPÍTULO 49 | TE MERECES EL MUNDO |

Me quede inmóvil mirando mis zapatillas. Su voz masculina y acogedora, podría reconocerla entre un bullicio enorme. Levanté mi cabeza y mi mirada chocó con la suya, era Tom...en carne y hueso en frente de mi. Parecía un sueño, no podía estar soñando. Me puse de pie mirando sus ojos grises. Su mirada era segura y a la vez triste, estaba bajo la lluvia mirandome con un gorro de lana puesto más el gorro de su chaqueta. Quise correr a abrazarlo, colgarme de su cuello y decirle que estaba arrepentida por todo, pero los pensamientos fugaces en mi mente eran muy complicados ¿él viajó hasta aquí por mi?

— ¿qué haces aquí? — mi voz sonó entrecortada.

— TOM'S POV

Y finalmente aquí estoy...

Después de haber pensando en que no debía dejar ir a _______, trate de recuperarme lo más rápido posible para volver a jugar. En cuanto me pagaron, compre los pasajes y sin pensarlo tomé el avión con rumbo a México...Cole me dió la dirección en la cual _______ estaba quedandose. En el mejor de los casos me pudo haber tocado un día soleado y lindo, pero no...estaba lloviendo y el frio era demasiado. Estaba seguro de mi, no como la primera vez que fuí a su casa...esta vez no estaba nervioso, llegue con mis manos vacias...demonios, sólo quería solucionar todo...llamenme loco, estoy enamorado.

Al verla sentada fuera del edificio, hizo que mi corazón se acelerara ¿qué hacía ahí muriendo de frio? suspiré hasta que estuve relativamente cerca de ella "¿estarás toda la vida sentada ahí esperando que tu principe azul aparezca?" esa pregunta vino a mi mente ya que _______ estaba concentrada en el suelo y totalmente triste.

Se puso de pie confundida mirando mis ojos, como asimilando que yo realmente estaba ahí y no era un sueño o un holograma.

Su voz sonó temblorosa al instante y muy confundida. Esperaba que me recibiera con un abrazo y besos, pero ya no iba a exigir nada. Estaba completamente mojado para molestarme una vez más.

— vine por ti — respondí seguro.

Sus ojos se abrieron ilusionados, se acercó a mi con lentitud sin importarle que estuvieramos bajo la lluvia, en realidad a mi ya me había dejado de importar hace minutos.

— eso no es cierto — fijo sus ojos verdes en los míos, temerosos. Podía sentir lo nerviosa que estaba, en cambio yo no estaba para nada nervioso...sólo esperaba arreglar todo.

— no tengo otra razón para venir aquí — mis manos seguían en mis bolsillos — sólo tú.

— no puedo creerlo — su voz se quebró mientras me miraba a los ojos. Su rostro estaba mojado, pero pude notar de que lágrimas recorrían sus mejillas en el momento que sus ojos fueron mucho más intensos.

— estoy aquí, soy real — reí.

— eso es lo que no creo ¿por qué estas aquí? — preguntó confundida, pasando sus manos por sus mejillas humedas.

Suspiré mirandola. Era tan malditamente perfecta.

— porque te amo — respondí sincero y sacando mis manos de mis bolsillos, puse ambas manos en su rostro frio mirandola — por eso estoy aquí porque realmente te amo con mi vida

Ella suspiró mirandome, mis manos seguían en su rostro, pero sólo nos mirabamos tratando de analizar en los ojos del otro.

— cometí un error — dijo mirandome.

Todo nuestro alrededor parecía estar en pausa, sólo existiamos nosotros. No nos importaba nada más que mirarnos y hablar.

— estuve mal Tom — continuó. Mis manos bajaron nuevamente a mis costados — no te demostré que realmente estoy enamorada de ti, no sabía que te sentías mal