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—Uhg...

Mantengo la vista alzada contra Uraraka, está jadeante y agotada.

Después de realizar una patrulla de rutina por la ciudad, hemos encontrado la oportunidad de actúar, aunque la situación sea de un delito menor.

—Lo tengo —atribuye inmovilizando al joven carterista contra el pavimento orgullosa.

Se nos estaba explicando el rol de un héroe mientras caminábamos tranquilamente cuando alguien grito "Ladrón" y un joven salía despavorido al otro lado de la calle abriendose paso entre las personas a empujones y golpes.

Sin duda era alguien veloz, pero no sé comparaba a la velocidad de Lida y allí fue cuando mi mente que no pudo estar más distraída lo hizo, ya que permanecí inmóvil procesando la misma imagen de la última vez de aquel chico en lugar de ir detrás del ladrón.

—Tch... —escucho el rechistar de Bakugo, quien al parecer se encontraba igualmente perdido y molesto.

«Lida...»alzo la vista el cielo como si fuera posible verlo.

Un chico con el color de cabello idéntico al mío, de expresión severa y estricta pero personalidad amable y noble.

En estos momentos se encontraba en Hosu realizando su pasantía, el mismo lugar donde ocurrió el incidente con su hermano mayor. Izuku me habló poco después de saberlo y los medios se encargaron del resto, un hecho realmente desconcertante.

—Humm —mis manos se contraen mordiendo mi labio.

Había tratado de hablar con él, no obstante, no logré desestimarlo en su decisión en ir a ese lugar.

Ninguna sorpresa honestamente.

«Esa mirada...»desvío la punto en un punto en el aire visualizando esa expresión una vez más.

Una expresión que conocía demasiado bien para ignorarla. Una sensación tan densa que emanaba e imposible de olvidarla.

Guardaba al momento demasiadas cosas para recordar eso, pero ahora, sentía la necesidad en hacer algo, tal vez como una excusa para distraerme de mis propios pensamientos, o por verdadera preocupación en el chico, simplemente no lo entendía.

—Oye, Hinata —demoro un segundo en reaccionar que soy llamada—. Vamos —indica retomando la marcha nuestro instructor.

Estaba quedándome atrás de ellos.

Debía tener más cuidado en mis acciones por el momento.

—Si —replico siguiendo detrás.

Sin embargo, si yo me colocaba en el lugar de Lida, me cuestiono si no seguiría el mismo camino, por lo que culparlo o justificarlo no cabía en mi cabeza tampoco.

Muevo la mano a mi bolsillo tomando el móvil entre los dedos.

«¿Debería llamarlo?»dudo observando la espalda de mis compañeros adelante.

La realidad no era alguien muy cercana a él verdaderamente, las veces de las cuales entable con una conversación son contadas, y en estos instantes no me sentía del todo animada para hablar con él cuando no me encontraba en una mejor situación. Simplemente ridículo.

Confundida, molesta, preocupada o desanimada... No comprendía mis emociones entremezcladas.

Pasos—Hinata.

«Alguien»tarde alzó la mirada.

La castaña se acerca denotando una ligera preocupación en sus ojos—. ¿Estás bien?.... Luces distraída... Y Bakugo parece molesto... —responde cuidadosamente fijando la vista contra mi e intercalado con la del chico rubio esperando alguna reacción inexistente por mi parte.

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