YOU'D CHOOSE ME, RIGHT?

LOKI

-¿Que tal ha ido el instituto, Liv?- me preguntó Clint mientras lanzábamos dardos a una diana. Yo apunté y lancé para clavarlo en el centro de esta.

-Bastante bien, la verdad.-volví a lanzar.- Aunque es un poco estresante que te estén recordando todo el rato que eres la hija de un millonario.- me sinceré. Clint sonrió levemente.

-Es normal. Les debe chocar ver alguien con tanta clase.- ambos nos reímos de su comentario.- Tú sé tu misma y todo irá bien.- me aconsejó.- Y si no...- lanzó un dardo que dio de lleno en el centro.- Ojo de Halcón está a tu servicio.- le regalé una sonrisa sincera.

-Gracias.- de repente Thor entró en la habitación como un torpedo. Nosotros nos giramos hacia él y le miramos desconcertados. Él intentó recuperar la respiración.

-M-mañana vendrá mi hermano.- dijo intentando coger algo de aire.

-¿Tu hermano?- le preguntó Clint sorprendido.

-¿Loki?- volví a preguntar yo. El grandullón asintió.- ¿Soy yo o ese tío era malvado?- pregunté a los dos hombres.

-No es malvado.- le defendió el rubio.- Solo está incomprendido. Y quiero pasar tiempo con él. Tu padre ha aceptado, así que no quiero pegas. ¿Entendido?- nos señaló. Yo levanté las manos en señal de rendirme.- Bien.- parecía que volvía a respirar con regularidad.- ¿El insti bien, Liv?- me preguntó casualmente.

-Bastante, sí.- respondí del mismo modo.

-Genial. Manda un saludo a Peter de mi parte.- espetó y se volvió a largar corriendo.

-No le vas a decir nada, ¿no?- obvió Clint.

-Absolutamente no.- aclaré. El moreno asintió y seguimos a lo nuestro.

En el segundo día de instituto me sentí mucho más aclimatada, aunque seguía algo incómoda por la extraña atención que me prestaba la gente. No lo hacían por mi físico, ni por mis habilidades académicas. Ni siquiera por ser la nueva, solo lo hacían por mi padre. Si ya supieran que este era Iron Man, no podría ni respirar. Igualmente, la situación se me hacía agobiante y no acababa de agradarme.

-Y cuando me fui de vacaciones a España, flipé con la comida. He de remarcar que la tortilla de patata está buenísima.- expuso Lizz. Estaba con Betty y algunas otras chicas de mi clase hablando sobre los viajes que habíamos hecho. Por supuesto, yo no hablé del viaje de Italia, ya que no creo que ninguna coartada fuera lo demasiado creíble.

-Olivia.- escuchamos una voz a mis espaldas, que parecía llamarme. Mis ojos se encontraron rápidamente con los del chico araña. Las chicas le miraron confusas.- ¿Podemos hablar un segundo? Es sobre la beca.- explicó apretando los labios. Yo me contuve e intenté parecer la persona más amable del planeta.

-Claro, ahora vuelvo chicas.- les avisé. Estas asintieron y yo me moví hacia una esquina de la cafetería con Peter, recuperando mi semblante serio. Nos paramos y nos miramos el uno al otro.- ¿Y bien...?- el chico cogió aire. Parecía que estaba cogiendo fuerzas para hablar.

-Me preguntaba si no me necesitáis para nada.- yo me quedé sorprendida por sus palabras, pero no dije nada.- H-he estado mandándoles mensajes a Happy, porque tu padre me dijo que ya me llamaría si me necesitaba para otra misión, pero no me ha llamado. He pensado que quizás se había cambiado de teléfono o...- mostró el teléfono con los mensajes.

-Peter.- le frené, poniendo mi mano sobre el teléfono, haciendo que nuestras manos se tocaran. Ambos las miramos y yo la retiré rápidamente.- Mira, no quiero ser borde, pero si nadie te ha llamado es porque no te necesitan.- noté como al chico se le apagaba el rosto y me sentí bastante mal, aunque supe ocultarlo bastante bien.- Lleva muchos años de entrenamiento estar en un equipo de este calibre y tú ya has pasado el  verano con mi padre. Deberías estar satisfecho.- el moreno me miró decepcionado.- Pero si mi padre necesita a alguien me lo dirá y yo te lo haré saber.- él pareció alegrarse por mis palabras.- Pero no te ilusiones.- le advertí volviendo a mi personalidad borde. Después de eso me largué de nuevo con las chicas, aunque me fui inevitable observar de reojo al moreno, que miraba a Lizz embelesado. El amor juvenil...

-Ya estoy aquí.- avisé al entrar a la base. Avancé al oír voces en la sala de descanso. Allí divisé al gran.- Loki.- le saludé, haciendo que todos los presentes se girasen. El nombrado me miró con una sonrisa burlona.

-Olivia.- me nombró. Yo me tensé y agarré más fuerte mi mochila.- Encantado de conocerte.- me tendió la mano, pero yo no se la estreché.

-Me gustaría decir lo mismo, pero lo último que oí de ti es que ibas matando a gente por ahí.- espeté sin pelos en la lengua. El se giró hacia su hermano.

-Se parece a su padre.- yo me crucé de brazos y rodé los ojos.- Aunque ella tiene más carácter.

-Está de nuestro lado, Liv.- intentó convencerme Thor. Yo observé a Nat, Bruce y Clint, que permanecían con una expresión completamente neutra. Yo me concentré y respiré profundamente. Finalmente le estreché la mano. El peli- negro sonrió.

-Creo que tenemos mucho en común, Olivia.- clavó sus ojos en mi.- Más de lo que parece.- yo le ignoré y me fui a mi habitación directamente. Mi padre me había hablado mil veces sobre Loki. Lo que había contado no era bueno, pero según me dijo Thor, ahora estaba mucho más calmado y buscaba algo más de paz en su vida. Yo decidí mantenerme alerta igualmente.

Encendí la televisión y dejé que pasaran las noticias mientras ojeaba unos apuntes que me habían dado en francés. De repente, una noticia llamó mi atención: "Spiderman lucha contra unos ladrones en un banco, que acaba explotando y quemando una finca cercana al edificio."

Me quedé petrificada cuando lo vi. Juro que en ese momento quise matar a Peter. Esa maldita mañana. ESA MALDITA MAÑANA LE HABÍA DICHO QUE SE MANTUVIERA APARTADO. Y el chico no era capaz ni de seguir unas simples instrucciones como esas.
Avancé a paso rápido hasta la sala de descanso.

-¿¡Habéis visto las noticias?!- grité alterada. Los presentes negaron y encendí la televisión. Todos observaron la noticia sorprendidos y avergonzados.

-Y parecía tonto...- soltó Thor.

-OS DIJE QUE ESTE CHICO ERA ESTÚPIDO. ESTA MISMA MAÑANA LE HE DICHO QUE NO SE METIERA EN ESTAS COSAS Y... ¡BOOM! Vamos a desobedecer a Olivia.- grité exagerando.

-Parece que ella y el chico araña son grandes amigos.- comentó Loki sarcásticamente.
Yo solté un grito de desesperación y volví a mi habitación. Para rematar, mi padre estaba de viaje con mi madre, así que no se lo podía contar. Maldito Peter Parker. Me ponía de los nervios.