Dulce chocolate - Changlix

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Dulce sorpresa

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El viernes llegó al fin, y los cuatro chicos estaban más que listos para su pijamada cuando recibieron una increíble noticia que se sumaba a sus razones para celebrar. Durante esa mañana se habían publicado las notas de los exámenes que habían rendido la semana anterior y todos, incluyendo a nuestro despistado Hyunjin, habían aprobado cada una de las materias con buenos resultados.

Como era de esperarse, Seungmin tenía un sobresaliente en todo, manteniendo su intachable promedio. Felix le seguía con varios nuevos e incluso un par de diez, demostrando su gran capacidad para retener información. Después de estos se encontraba Changbin quién, como predijo, había aprobado biología con la nota mínima, aunque el resto habían ido mejor de lo que esperaba. Por último, Hyunjin, quien no podía dejar de mirar con una sonrisa aquel papel donde, a pesar de estar al límite con varias asignaturas, le comprobaban que había aprobado todos sus exámenes, hasta obtuvo un 8 en matemática, siendo la nota más alta que obtuvo en aquella materia en toda su vida.

Estaba tan emocionado que no paró de hablar desde el segundo en que se sentaron en la mesa del comedor para almorzar. Se encontraba con una enorme sonrisa en su rostro y todo su ser pegado a Seungmin cual garrapata, pasando sus largos brazos por los hombros de este a modo de medio abrazo y agradeciendo de todas las maneras posibles el haberlos ayudado a estudiar. Para Hyunjin todo había sido gracias a aquel tierno castaño, por lo que no podía evitar sentirse extra cariñoso con el chico aquel día. Por su parte, Seungmin sólo podía mantenerse callado, con el rostro tan rojo como la manzana que estaba comiendo, y tratando de no gritar de la emoción frente a toda la escuela. Los otros dos los miraban con pequeñas sonrisas en sus rostros, contagiados por la alegría que emanaba de sus amigos, y aportaban algún que otro comentario.

— Deberías regalarle a Seungmin entradas en primera fila para tu próxima obra de teatro, Hwang. — Sugirió Changbin divertido ante la expresión de su amigo. — Ya sabes, como agradecimiento. — Luego le envió un evidente guiño cómplice al castaño, quien solo respondió con una mirada de odio por su tonto intento de exponerlo frente a su crush. Pero como ya era costumbre, Hyunjin ni siquiera se dio cuenta y hasta afirmó que esa era una increíble idea, por lo que le prometió al otro las entradas.

Continuaron bromeando y conversando para después dirigirse a sus respectivas clases. El último timbre resonó por la escuela y los diferentes alumnos (que no se quedaban para realizar actividades extra escolares) comenzaron a dirigirse a la salida. Entre ellos se encontraba Felix, quien se detuvo al lado de las rejas que daban a la calle para esperar que Changbin saliera del edificio, así poder volver juntos a casa como acostumbraban. El pelinegro le había mandado un mensaje diciendo que tardaría un rato, ya que Seungmin necesitaba ayuda para llevar unos libros a la oficina del director, así que le pidió que lo esperara allí.

Con una pequeña sonrisa se puso a jugar con su teléfono muy pacientemente, saludando de vez en cuando a algunos conocidos que pasaban por allí, hasta que unos murmullos llamaron su atención. Levantó la vista para encontrarse a varios estudiantes mirando hacía la calle, susurrando cosas que él no llegaba a escuchar y riendo tontamente. Como siempre fue curioso decidió seguir sus ojos hasta encontrar el motivo del escándalo.

El centro de las miradas se trataba de un chico rubio, no muy alto, con la piel ligeramente bronceada. Se lo notaba nervioso, mientras mordía distraídamente sus uñas y movía sus ojos oscuros en diferentes direcciones, como buscando a algo o a alguien. En el fondo, Felix pudo entender porque la gente estaba tan atenta al chico. Jamás lo había visto rondar la escuela y, aunque parecían tener la misma edad, no llevaba mochila o un uniforme escolar. Simplemente vestía de manera casual con unos jeans oscuros rotos, una camisa celeste abierta que dejaba ver una remera negra de Metallica desgastada y una gorra del mismo color.