☀️ - 01

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El clima árido de una tarde de calor intenso de Junio golpeaba los rostros de quienes miraban al cielo por unos segundos comprobando aún más que el inmenso astro dorado quemaba sus pieles en plenitud. Para aquellos que no habían corrido con suerte de cargar con ellos un poco de bloqueador solar, este hacia estragos en sus pieles, causando la coloración exagerada en ellos.

Para Seokjin esto ya no era nuevo.

Estaba tan acostumbrado a este tipo de calor infernal cuando salía a la piscina y daba sus rondines diarios por alrededor de ella, atrayendo por supuesto, las miradas con lascivia de las chicas con bikinis ajustados y reveladores que aplicaban torpemente su bloqueador o charlaban con otras jóvenes.

No era muy agraciado con fuertes brazos o escultural abdomen en six pack, pero lo que lo hacía superior al resto de chicos era su blanca y pálida piel; además del bonito rostro de ángel con labios de infarto.

Eso hacía babear a muchas chicas, sin querer lo había escuchado hace un par de semanas.

También había oído que su compañero atraía tantas o más miradas como él.

No le importo, por supuesto. Aquello no se convertiría en una tonta competencia por ver quien seducía a más jovencitas o quien de los dos lograba llevarse más bragas a los bolsillos luego de terminar una noche con ellas.

Eso no era el estilo de Kim Seokjin, pero si del de Jeon Jungkook.

– Veo que ya estás aquí, niño bonito.

Por más ocasiones en las que ellos hayan peleado por los típicos insultos que se daban sin razón, seguían volviendo a llamarse de aquellas maneras porque sencillamente no les gustaba escuchar al otro.

– Piérdete lejos, tucán y déjame a mi hacer mi trabajo.

– ¿Conseguiste que Lalisa te prestara sus llaves para guardar todo luego del día?

– ¿Por quién me tomas? Es obvio que las conseguí, ella me adora y a ti te odia.

– Sólo porque le rechacé un buen polvo, ¿Tu lo habrías hecho sabiendo que ella está saliendo con el jefe?

– Ni loco. Preferiría jalarmela solo a que ese mastodonte me corte el pito por meterla en su novia.

– Que bien que simpatices conmigo.

Rieron un poco revisando todo lo necesario una vez que estuvieran fuera dando los rondines juntos.

Ambos eran salvavidas. Ambos daban rondines juntos. Ambos eran compañeros.

Pero no se llevaban bien.

Seokjin gozaba cuando podía escaparse de él y rondar por si sólo acaparando toda la atención de las chicas e incluso el quedarse junto a ellas y con suerte conseguir que ellas no se le tiraran encima dándole inmediatamente sus números de teléfono o insinuandosele.

También cuando desde la torre más alta podía observar todo el movimiento que ocurría dentro del lugar, se sentía tan dichoso estar allí. Es más se sentía el rey del lugar.

– No mendigues en el trabajo, Kim. Anda, mueve tu trasero para seguir con los rondines.

– Puedes ir tu sólo, Jeon. Yo me quedaré en la torre.

Los costos lentes de sol de marca Gucci que se había comprado en una tarde de compras con su primo Taehyung, le fueron arrebatados del rostro, en cambio obtuvo la mirada enojada del chico más idiota que alguna vez había conocido.

– Que muevas tu culo sino quieres que Mike y yo nos hagamos cargo de tu salario.

– Tu no hablas con RH* nunca.

* RH= Recursos Humanos

– Mike y yo somos cercanos. Si no me crees, puedes preguntarle quien le recomendó un bien lugar para realizarse sus tatoos nuevos.

Maldito bastardo el que tenía al frente.















N/A:

Me aburrí de esperar a que JK actualice y como tengo muchas ideas, ahora les traigo esta ;)

No me maten, prometo terminar las demás y sus especiales u.u ando en eso, perdón.

Esta historia contará con 10 caps como máximo ^^ disfrutenla

watermelon sugar; jeongjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora