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Ambos bajaron de allí tomando sus gorros para tapar sus cabezas, Jin puso sus lentes de sol de nuevo, los cuales le arrebató a Jungkook con la idea de que podría robarselos si este no se los quitaba antes y arregló su camiseta que estaba descubierta de los primeros cuatro botones dejando su cuello y torso a la vista de todos.

En contraste de Jungkook, que no llevaba una camiseta ni lentes para ocultar las miradas coquetas que le dirigía a las chicas cuando estas sin disimulo se los comían con la mirada y presionaban su labio inferior entre sus dientes.

– Escuché decir de Kai que la ventilación de las duchas del ala 3 no estaba funcionando correctamente, hay que ir a darle un vistazo.

– Sí, sí, como digas.

– ¿Me estás escuchando intento fallido de Playboy?

– La verdad que no, pero en vista de que vamos caminando hacia la entrada, podría deducir que Kai te dijo de la falla.

– Eso no tiene ningún sentido.

– Tampoco el que me llames intento de fallido de algo. Cuando ambos sabemos, que yo puedo ser todo.

– Cálmate Barbie, vamos a terminar con eso que hay muchas chicas allá que esperan que les aplique el bloqueador.

– Teniendome a mí, no se porque ellas te siguen buscando.

– Porque soy mucho más hermoso que tú y les gusto a las chicas incluso más lindas.

– Te ven como algo más fácil, ¿sabes? Ellas saben que conmigo hay menos oportunidades pero tú cara de muñeco...

– Deja de llamarme así y comienza a buscar donde esta la falla.

Disponiéndose a encontrar el error, se concentraron en revisar cada espacio entre las aspas del ventilador, pero sin percatarse que sus propios movimientos harían que el poco aire que esté emanaba cerrara el lugar de allí encerradolos debido a que esta sólo podía ser abierta por fuera.

Un requisito para la sala de ventilación de ese lugar.

Sin haberse dado cuenta, los chicos encontraron el detalle sin problema y entre los dos y sin mayores charlas, terminaron de reparar lo que para ellos no estaba incluido en sus contratos.

El primero en bajarse de las escalerillas fue Jungkook, que de un salto al suelo se dirigió primero a la puerta encontrandola cerrada y asustandose cuando no pudo encontrar una manija de ese lado.

Seokjin al ver que este no había salido huyendo, alzó una ceja en confusión pero cuando pudo percatarse del porque Jungkook seguía con él, prefirió con todas sus fuerzas que el pesado chico hubiera huido.

– ¿Y ahora que vamos a hacer?

– ¿No traes tu móvil contigo?

– Sabes que no idiota, los teléfonos son completamente inútiles si alguien resulta ahogado o en peligro y no hay tiempo para guardar tus pertenencias. ¿¿Has olvidado todo ahora zopenco?

– ¡Cálmate Kim, sólo hice una pregunta! Diablos, ¿tienes un ataque de pánico o algo así?

No quería admitirlo pero Jin comenzó a sentirse bastante mal estando encerrado en esas cuatro paredes junto a alguien más. Aunque si estuviera solo sería aún peor.

Quizás si era claustrofóbico, nunca había experimentado algo como eso así que no lo sabría, pero ahora jadeaba por llevar aire a sus pulmones que colapsaban con cada intento de respirar.

– Mierda, Jin. Respira, joder respira.

Jungkook comenzó a tener miedo por la hiperventilación que hacía su compañero de trabajo, santa mierda, había lidiado con eso mucho tiempo ya debía estar preparado para este tipo de cosas.

Y lo estaba, pero de alguna manera alguien cercano a él era quien perdía la cordura, no alguien a quien jamás en su vida había visto.



















N/A:

Prometo que esta queda hoy... para la noche... quizás xd

Les dejo leer sin más

watermelon sugar; jeongjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora