La Sangre Del Vampiro Es Mi Sangre

Capitulo 3

Después de que Morfeo me mostrara las atrocidades de mi padre en sueños. Desperté a las 3am.

Tome agua y volví a dormir solo que este sueño era diferente, y era algo que no conocía.

Estaba drogada, sentía cansancio, el cuerpo tan ligero y a la vez tan pesado, olía a desinfectante y limón, como en un hospital. No podía abrir los ojos, pero si podía escuchar. Eran dos personas una mujer con voz delicada, y un hombre con voz áspera. Solo entendí algunas palabras porque estaban en un idioma desconocido para mí.

Entendí que estaban haciendo pruebas con personas, no sé si eran humanas o sobrenaturales, pero yo en ese sueño era una de esas personas. Intente moverme pero estaba amarrada. No sé qué material era pero era fuerte y frio, y sé que metal no era. La chica dijo que me tenían que inyectar una... ¿tercera especie? No entendí después de eso, me inyecto y el líquido era espeso, por lo que dolió mucho pero no pude gritar, solo solté gruñidos de protesta que no sirvieron de nada, porque no pararon.

Sentí un temblor en el cuerpo, arque mi espalda, abrí mi boca para gritar pero todavía mi voz no salía, ni siquiera un gruñido nada, abrí los ojos de golpe pero todo era borroso. Tenía la cabeza hacia atrás, mi cuerpo, yo convulsionaba y después todo se volvió negro y desperté.

Estaba jadeando y sudando frio, mi pecho subía y bajaba exageradamente. Corrí hacia al baño y vi mi cara, me tape la boca para no gritar.

Mi ojos eran de un color brillante dorado, cerré los ojos, y los volví a abrir todavía estaban ahí. Respire, me calme, pensé en música, en algo relajante, baje mi cabeza luego la levante, mis ojos verde agua volvían, me calme y respire hondo.

¿Todo normal? Me pregunte a mí misma en mi mente, Salí del baño y revise la hora 5am perfecto.

Hice la misma rutina de ayer, mis padres no están despierto creo. Como siempre me equivoque. Mi papa estaba en la sala comiendo, me vio pero lo ignore. Iba a agarrar las llaves pero hablo.

- ¿Tu agarraste la llave de la habitación donde duermes verdad?, bueno es hora de darte una lección si me desafías, o tal vez dos por entrar a mi cuarto.- dijo mirándome fijamente, sentí fuego en su mirada, automáticamente mi cuerpo se paralizo del miedo, y estoy segura que se dio cuenta cuando mi cuerpo se tensó.

Se levantó como una cobra para devorar a su presa, en este caso su propia hija.

Me agarro por el cabello y me llevo a la cocina arrastrada. Prendió la cocina, puso un sartén con aceite. Esto es nuevo, significa más doloroso.

Mientras calentaba a fuego rápido el sartén con aceite. Me dio un golpe en las rodillas, caí arrodillada ante él. Y fue ahí cuando entendí todo.

Se desabrocho desesperadamente el pantalón, y se bajó el bóxer. Trague duro porque se lo que vendrá. Mi agarro el pelo, y su erección ahora creciente, su pene, lo introduzco a mi boca, me atragante. El agarraba mi pelo y tiraba de mí hacia atrás y hacia adelante. Hacia un sonido de lo más asqueroso e humillante. Ahora era más rápido y duro. Y se vino en mi boca. Apenas sentí su líquido, lo escupí, no quiero que mi paladar sienta su sabor, no quiero saber su sabor repugnante y asqueroso.

Se subió el bóxer y el pantalón. Se los abrocho. Me levanto jalando mi pelo hacia arriba, vi el sartén ya caliente con el aceite burbujeando. Y metió mis manos en el aceite. Por más que intentará no gritar, no pude aguantar. Grite a pulmón, y me dio una cachetada que logro llevarme al suelo.

- si vuelves a gritar, le diré a tu madre que te quite las cuerdas vocales.- dijo con irritación y molestia.

Apago la cocina y se fue. Me dejo ahí tirada. Me sentí asqueada. Sentí el sabor de mi sangre en la boca, y vi como caían gotas de sangre. Era en la parte derecha de mi sien. Goteaba por el impacto del piso cuando caí. Subí a mi cuarto, mi papá ya no estaba en sala, tampoco mamá. Tengo el cachete morado. No lo podre tapar. Tengo un corte en mi sien, al igual que en mi boca.