Bajo la lluvia se encontraba Park Jimin, enojado y triste. En la banqueta se estaba un auto y fue directo ahí, pensado que era el taxi que había pedido. Al entrar solo menciono que arrancara el auto. Pero ahí se encontraba Jeon Jungkook sorprendido...
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Era una mañana común y corriente, inicio de semana donde toda la gente volvía a la rutina de siempre, levantarse temprano era una tortura para la mayoría de las personas y uno de ellos era Jungkook, odiaba pararse temprano para ir a trabajar, cuando estudiaba le costaba más trabajo debido a que estar estudiando y soportar a los profesores era un castigo, más el estrés de los exámenes, trabajos y cumplir con las expectativas de los padres, era muy frustrante. Pero lo único bueno es que al menos trabajaba en lo que le gustaba y ganaba dinero por su esfuerzo.
Hizo unos pequeños estiramientos para que el sueño se fuera y no se durmiera mientras se estuviera bañando, sintió raro no despertar con nadie a su lado, sumándole el sueño que tuvo lo aturdió un poco, puesto que había sonado con aquel rubio de linda sonrisa que causa que sus ojos se cerrarán y creara una hermosa vista que no podía dejar de ver.
El día anterior su novio había estado un poco raro y distante, habían acordado ver una serie todo el día, pero no fue así. Cada quien estaba en lo suyo, él se la paso viendo películas todo el día y Eunwoo se quedó en su estudio, había dicho que le enviaron unos documentos de sus pacientes y los tenía que rectificar para que no hubiera nada mal.
Eso le había parecido muy raro, puesto que el no checaba eso, su asistente se encargaba de eso, pero no lo quería cuestionar, para evitar una discusión y que terminaran en una pelea sin hablarse. Había pensado Jungkook que tal vez estaba muy estresado o nervioso por su tercer aniversario, no habían hablado sobre eso, de que iban a hacer o a donde iban a viajar y eso también lo ponía inquieto, ya que su novio cada vez que cumplían un mes lo quería festejar como si fuera un aniversario de bodas, entonces a cumplir un año se ponía más feliz y lo festejaba en grande.
Pero al parecer este tercer año no iba hacer así, no habían planeado nada, ni siquiera Eunwoo había dicho nada sobre si quería viajar fuera del país, como había sido el primer año que cumplieron de pareja.
Termino de bañarse y se cambió, hoy iba a tener mucho trabajo y tan solo de pensarlo ya le cansaba. Durante el día anterior estaba viendo películas solo, durante pasaba el tiempo su cerebro le causaba pensar en el chico rubio, varias preguntas habían llegado a su cabeza ¿Estará bien? ¿Qué estará haciendo? ¿Cómo sería ver películas con él? ¿Sera divertido? ¿Estará con su novia? ¿Lo volverá a ver? Y más preguntas llegaron, ninguna de ellas las podía responder, pero tal vez algunas sí ¿Me gustó estar con Jimin? ¿Acaso me gusta el? ¿Lo extraño?
No lo sabía con exactitud, pero le daba miedo responderlas, se acordó que no le había pedido su número y eso le hacía sentir mal. Pero en eso su celular comenzó a sonar y observo que era un número que no había registrado, entonces contesto, solo esperaba que no fuera ninguna oferta o algo del banco.
—Hola, Jungkook. —hablo una voz dulce y conocida.
—Hola—¿acaso era él? —, mmm ¿Jimin?
—Sí, pensé que no me ibas a reconocer. —¿Cómo no lo iba a reconocer? Tan solo basto de unas horas para que estuviera en su mente y no lo pueda olvidar.
