B R O K E N Extras

Extra 14 | Smile |

Ubicación temporal: Después del capítulo 43 antes del Epílogo.

🌼

Sam observó por primera vez al supersoldado con un termo de café tamaño jumbo, unas ojeras como si de búho se tratara y para colmo llegaba tarde.

-¡Hey Buck! ¿Qué te pasó? -este se acercó con lentitud bostezando a cada segundo. Tenía la energía muy baja- ¿Porqué tienes esa cara?

-Eileen- contesto- no durmió en toda la noche.

-¿Está enferma?- Bucky nego con la cabeza.

-No, es igual a su madre, odian el calor- dijo dejándose caer en la banca del cuarto de entrenamiento y bebiendo un gran trago de café-Siento que he envejecido más las últimas dos semanas que los últimos cien años.

-Uh. Pero ¿Lo vale? - pregunto tratando de animarlo.

La recién nacida tenía solo dos semanas de haber llegado a casa de la familia Barnes Maximoff, y había sido toda una aventura. Generalmente era tranquila y dormía demasiado, pero cuando el verano llegó a su máximo punto, lloraba por las noches. Wanda que había sufrido algo similar al adaptarse al clima cálido, la envolvía en una mantita y juntas salían al jardín dónde la ligera brisa las ayudaba. Le gustaba verlas por la ventana, escuchaba a Wanda cantar, hablarle sobre su hermano, o mostrarle su magia abiertamente.

Pero aquella noche en que la temperatura subió demasiado, no lograban que la pequeña dejara de llorar, aunque la habían dejado solo con una ligera camiseta. Y logro dormirse hasta la madrugada cuando la brisa inundó la casa. Wanda casi se quedaba dormida con ella en brazos, y aunque le insistió en irse a dormir, Bucky se negó, si necesitaba quedarse despierto a su lado, lo haría.

Pero esa mañana, mientras ambos miraban a la pequeña, entendieron que todos esos sacrificios, que las horas perdidas de sueño, que el estrés, y su cuerpo agotado, valía la pena. Y todo se resumió a ese momento en que la vieron sonreír, sus dos ojitos verdes océanos estaban bien abiertos y sus labios formaron esa ligera curva, que dejó ver su pequeña lengüita. Era su primera sonrisa y eso fue suficiente para ambos para alegrarles el día.

-Cada segundo..- susurro con una sonrisa- Desde que la sostuve en mis brazos.

Sam asintio con la cabeza mientras se sentaba a su lado-Tal vez deberías tomarte el día libre Buck.

-Tal vez- dijo tomando otro sorbo de café.