♥ Siempre fuiste tú ♥

Capítulo 26

-¡Cállese, Calderón! Ella no va a estar con nadie más. Yo jamás volveré a hacerle daño. Jamás la dejaré ir, porque de verdad yo la quiero-

-Claro, hermano, si usted lo dice yo le creo-

-Más le vale-

Patricia abrió la puerta. –Armando, acaba de llamar Marce diciendo que no volverá hasta mañana-

-¿Cómo así?-

-Pues eso, que no va a venir a la empresa hasta mañana-

-¿Y dónde se encuentra ahora?-

-No lo sé, no me lo dijo-

-Okay, Patricia, gracias-

-Sí, si- Sale de la oficina

-Ay, Mario, seguramente esa mujer ni me quiere ver. Debe de estar en su departamento-

-¿Y qué? ¿La va a ir a buscar?-

-Por supuesto, hermano. Mañana salimos de viaje y no quiero estar mal con ella, ¿me entiende?-

-Claro, Armando. Vaya-

-Cualquier cosa me está llamando, ¿vale?-

-Sí, mi ex presidente. Usted vaya y arregle las cosas con su novia tranquilo-

-Gracias, Mario. Si no regreso por la tarde, nos vemos mañana-

-Que Dios lo acompañe- dice con su risa burlona

Armando rodea los ojos, sale de la oficina y se va a presidencia

-Hola, Betty-

-Hola, Armando. Lo siento por lo del almuerzo-

-No te preocupes, ya conocemos a Danielito-

-Si.... Dime, ¿pasa algo?-

-Oh, sí. Lo que pasa es que tengo que salir. No sé si vaya a volver por la tarde o hasta mañana. Tengo que resolver unos asuntos con Marcela antes del viaje, ¿me comprendes, Betty?-

-Ah... sí, sí, claro. Ve, no hay problema-

-Si necesita algo, me llaman, por favor-

-Claro, no te preocupes-

-Bueno, Be, gracias- se acerca y se despide con un beso en la mejilla. –Hasta luego-

-Bye-

Oficina de Daniel

Nicolás y Daniel se encontraban trabajando juntos. Había demasiado trabajo y no parecía que iba a terminar pronto, seguramente terminaría su jornada laboral nuevamente agotado. Pero todos daban su mayor esfuerzo para que todo saliera lo mejor posible y que esta nueva colección sacara del hoyo financiero a Ecomoda.

Daniel se iba acostumbrando a como trabajaban en Ecomoda y a trabajar con eficiencia junto a Nicolás, al final de cuentas no había sido tan malo trabajar con él. Estaba realmente preparado y se colaboraban mutuamente.

Habían entablado una extraña relación de trabajo en la que había cordialidad, por lo menos no se ofendían cada vez que se veían o se veían de una manera desafiante como antes. Habían entendido que su relación debía mejorar si querían hacer su trabajo de una manera correcta. Claro que sus conversaciones seguían plagadas de sarcasmo y chocaban algunas veces. Sabían que eran más eficientes trabajando juntos. Además, Daniel sabia lo importante que era Mora para Betty, y no quería decepcionarla al seguir tratándolo con indiferencia aunque el creyese que ella podría seguir sintiendo algo por él.