Parte 3: Malentendido

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- Lo siento hermano, ocurrió una emergencia – Entro al auto ya que aun la temperatura era bastante baja

- Guanyao llamó

- Lo imaginé, ya hablare con él; discúlpame con nuestros padres y con los de tu novio, enserio fue una emergencia - XiChen quería dejar todo y volver a esa habitación, pero sin duda debía al menos llamar a su hermano.

- Entiendo, ¿fue grave? Suenas agitado – Lan Zhan seguía con su tono impasible, pero denotaba la preocupación

- No te alarmes estoy bien fue solo un imprevisto, te contare después – Una breve muletilla se oyó a la otra línea y después un pitido.

Entonces la culpa lo picó, le había sido infiel a su esposo, en un principio de no ser por el incidente el no se hubiera casado, pero ahora que lo estaba lo había respetado; incluso no se atrevía a besarlo porque lo cierto es que no sentía deseo por él. Aún se cuestionaba como esa noche había caído en sus garras, en un principio pensó que él lo había hecho por interés y al momento de casarse lo forzó a firmar capitulaciones, sin embargo, este accedió y de no ser por sus celos obsesivos se podía decir que tenían buena convivencia. Como XiChen no se había interesado en nadie continuo con el matrimonio y pensó que así sería, pero ahora, sentía que si podía elegir quería a ese chico, no sabía nada de él pero después de todo el deseo y la calidez que había sentido la noche anterior, anhelo tenerlas todos los días.

- MingJue

- Pero si es mi buen amigo XiChen - una risa fuerte sonó - Te estuvimos esperando, pero no llegaste, seguro esa pulga obsesiva no te dejó venir.

- Necesito un abogado - el tono de XiChen era fuerte y ocasiono que el otro casi de atragantara.

- ¿Como? ¿Estás en la cárcel? - la preocupación y el desconcierto era palpable,

- ¿Qué? No, quiero el divorcio – Respondió, sorprendido por las conclusiones de su amigo.

- Oh, XiChen termina tus frases ya estás como tu hermano, me metiste un susto... Espera ¿qué? ¿Enserio?

- Si

- No es como que no lo esperara, pero tú mismo dijiste que tu familia no creía en el divorcio y que tu continuarías hasta el final.

- Se lo que dije, pero creo que encontré a mi omega destinado- sonrió

- Entiendo ¿qué? - escupió

- Puedes dejar de sorprenderte por todo- río XiChen

- Lo siento, pero casi creo que no eres tú ¿enserio crees en esas cosas del destino?

- Claro que si - Sonrió, desde muy pequeño a los Lan se les inculcaba sobre su pareja destinada, su padre tuvo suerte y la hallo, lastimosamente su tío no lo hizo y por eso este prefirió quedarse soltero, aunque él creía que tampoco la hallaría y por eso se había resignado con aquel matrimonio, ahora de nuevo volvía a creer en este.

- Se me olvidaba lo cursi que son los Lan- rio - Ya hablaremos bien de eso personalmente; seré tu abogado sin duda - la suficiencia se palpó

- De acuerdo, colgare -

XiChen con un poco menos de culpa ingreso a la habitación designada, sin embargo, para su sorpresa ya no estaba el joven, tampoco su saco; entro al baño y tampoco lo encontró salió agitado y el recepcionista lo observo como si de un bicho raro se tratara.

- Disculpa, ¿el joven ya se fue? - Huaisang asintió.

- ¿Dejo algo para mí? – Huaisang ahora lo veía con lastima

Un loto marchito (XiCheng)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora