Bebé, el cielo está en tus ojos •Frededdy• [Adaptación]

Capítulo 23

Era el día de la graduación cuando Freddy recibió sus resultados del examen a través del correo electrónico. Estaba sentado a la mesa con su desayuno, a penas comiendo porque su corazón estaba amenazando con romper su caja torácica gracias al discurso que tenía que dar en unas pocas horas y por su plan para salir del clóset.

Sus padres le habían dado su teléfono de nuevo después de la fiesta de graduación y prometió centrarse en los exámenes. Prometió, pero tan pronto como estuvo solo en su habitación, comenzó a mandarle mensajes a Fred, olvidando por completo estudiar durante unas horas.

Fue agradable porque el mayor le hacía olvidarse de cosas estresantes cuando lo necesitaba. Fred era su escape y a Freddy le encantaba. Freddy lo amaba, y Fred lo amaba a él.

Una de las sirvientas llamó a su puerta para hacerle saber que ella tenía un sobre para él, así que después de que el menor cerrara la puerta, llamó al pálido porque quería ver sus puntuaciones juntas. Si Fred obtendría 85 o más, tenía la oportunidad de entrar en la Universidad de Londres, que era su plan desde el principio. Freddy ingresaría a Oxford o Colegio del Rey.

Sus padres querían Oxford, pero el castaño quería Colegio del Rey, ya que estaba más cerca de Fred y eran básicamente la misma cosa. Había conseguido las cartas de aceptación hace una semana, y él aún tenía que enviar una de ellas dando su respuesta.

"Hola" Respondió el azabache y Freddy entrecerró los ojos viendo la pantalla.

"¿Eso es un traje en la puerta del armario?"

El más alto asintió con la cabeza, riendo. "Me estoy preparando para la graduación de mi novio."

"Oh, Dios"

"¿Estás nervioso?"

"Un poco... Mucho, en realidad." Admitió y se sentó en su escritorio. "¿Estás nervioso?"

Ambas graduaciones eran hoy, pero la de Fred era dos horas después de la de Freddy.

"¿Tienes los resultados?"

"Sí. Vamos a abrirlos juntos, ¿No?"

"Mmh."

"Está bien, entonces. ¡Ahora!"

Ambos abrieron sus sobres con sus dientes, porque con la otra mano sostenían los teléfonos y ni siquiera les importaba que parecían completos idiotas.

"Tú primero." Dijo Fred y sus ojos se posaron en su hoja.

"Tengo noventa y ocho."

"¡Oh, Dios mío, eso es genial, Teddy!" Dijo con entusiasmo y el menor sonrió, antes de morderse el labio y pedirle al azabache que le mostrara sus resultados.

El pálido volteó su papel y lo acercó a la cámara para que así Freddy lo pudiera ver por sí mismo.

"¿Es eso un sesenta y cuatro o un ochenta y cuatro?"

"¡Ochenta y cuatro!" Exclamó el mayor feliz y Freddy sonrió cariñosamente, sintiendo mariposas en su estómago.

"¡Vas a entrar! Ugh, pero tenemos que esperar hasta mañana. Tengo que enviarles hoy la confirmación."

Fred se mordió el labio, obviamente sabiendo que su novio estaba en una situación de riesgo. Por un lado, si Freddy le respondiera a Oxford, entonces él definitivamente no estaría con Fred en el futuro, ya que sería una hora de diferencia. Por otro lado, si contestara al Colegio del Rey, podría haber una posibilidad de que Fred no ingresara en la Universidad de Londres. Eso significaba que tendría que ir a la Universidad en Madrid, lo que también significaba que Freddy se perdería de la oportunidad de ir a Oxford a causa de él.