𝚃𝚊𝚗𝚓𝚒𝚛𝚘 𝚡 𝚂𝚑𝚒𝚗𝚘𝚋𝚞

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¡Pedido de -_Tomik_-!

¡Gracias a El_cond0n_r0t0 por algunas ideas!

Luego de las batallas contra demonios en las cuales terminaba herido, el joven cazador solía concurrir a la finca mariposa. Pero había algo más que le impulsaba e inspiraba a terminar en ese lugar, sus ojos exigían ver a una chica. Cuando ella aparecía, Tanjiro no dudaba en expresar toda su alegría de una manera sutil. Cuando oía su voz, estrujaba las sábanas de la cama con sus manos. Se trataba de Shinobu, quien lo atendía especialmente a él. Era sospechoso que Tanjiro siempre se lastimase, aunque era únicamente para tener una excusa con tal de verla.

—¿Ahora qué te paso, Tanjiro-kun?

Tanjiro estaba sentado en la cama, se veía en óptimas condiciones. La aguda voz de Shinobu transmitía cierta sospecha, y también se sentía como una burla. Esto le encantaba oír, aunque le incomodaba no tener excusas para ingresar a la finca.

—E-Estoy enfermo, Shinobu-san.

En ese momento, Shinobu dejó salir de sus labios un calmado "ara". Lo miraba confusa, de arriba a abajo. La ropa de Tanjiro estaba desabrochada en su pecho, por lo cual podía ver sus pectorales. Al contrario de Tanjiro, ella no estaba sentada en la cama; estaba parada frente a él. Pero para revisarlo, se agachó un poco, la altura de su cabeza se alinearía con la del pecho del contrario, acercándose a él para buscar signos de " enfermedad" en su cuerpo.

—Bueno, no encuentro nada fuera de lo normal. Tu pulso está bien, aunque algo acelerado, y tu calor corporal... Está un poco elevado.

Tanjiro disfrutó el sentir la suave contrapalma de la mano de Shinobu, la cual apoyó en su frente para sentir su calor. Su rostro estaba bastante caliente, pero no por un resfrío ni mucho menos por una enfermedad, sino por un sonrojo. Además, ciertamente su cuerpo estaba caliente debido a los nervios, y a un líbido que se acrecentaba en su pecho. No podía evitar ver a la joven pilar de otra manera, una manera que le gustaba demasiado, una forma en la que le causaba calentura.

—S... Shinobu.

Para corresponder a su nombre, Shinobu lo miró a los ojos, no sin antes apoyar sus manos en los muslos del chico. Shinobu no era alguien idiota, se había dado cuenta de que el joven Tanjiro no estaba enfermo, estaba más que saludable. Aunque ella también podía sentirse de esa manera, ya que en primer lugar, nunca debería haber atendido a Tanjiro; ese era el trabajo de las otras chicas que trabajaban en la finca mariposa.

En la mirada que ambos se daban, parecía que se confesaban todo; el por qué de sus visitas a la finca mariposa, el motivo de Shinobu que le llevaba a atenderlo. La chica acercaba su rostro lentamente al del joven, empezando a cerrar sus ojos al momento en el que ya estaban demasiado cerca.

Tanjiro no podía sentirse mejor, mantenía sus ojos entreabiertos en aquella escena; siempre había querido acariciar el rostro de Shinobu, entonces tomó cuidadosamente la barbilla de la chica con una mano, reafirmándola para iniciar un corto y superficial beso, el cual le fue correspondido incluso con más ganas.

—Shinobu-san... ¿Qué pasa si alguien nos ve? ~ no estamos solos en la finca mariposa.

Pudo hablar en voz baja luego del beso, con precaución por si alguien podía encontrarse allí. Shinobu rió un poco, apegándose más al chico y empezando a sacarle la ropa del torso, el cual ya era bastante visible.

—Lo siento si te incomoda, Tanjiro-kun. Pero en estos momentos, no me importa si alguien nos ve o no~ En esta zona de la finca no suelen haber cazadores, tampoco ayudantes. ~

[🍋]  One-shots kimetsu No Yaiba  ᵖᵉᵈⁱᵈᵒˢ ᵃᵇⁱᵉʳᵗᵒˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora