Capitulo #012: La mejor solución para un ataque de pánico

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Después de que aquel vagón se llenara de las risas de los presentes, la peli negra se retiro una lagrima falsa de su ojo y tomaba aire.

Quería abrazarlos, llorar, ser una niña por una vez y no sobre pensar en cada movimiento, como si fuera una partida de ajedrez... Pero antes de que pudiera emitir algún sonido y dar inicio con su presentación las puertas del vagón fueron abiertas por segunda vez

– ¡Sev! Parece que este vagón está... -comenzó a decir una pelirroja con unos hermosos y cálidos ojos verde que hizo sonreír a Melody, pero aquel brillo se disipo cuando centro su vista en los chicos que estaba en aquel vagón – ¡Maldición!

– Mi Lily flor – dijo James, olvidándo por completo lo que estaba haciendo hasta hace unos minutos-

– Que no soy tuya Potter, y para ti soy Evans – contesto la pelirroja cruzándose de brazos-

– ¡Pero venga ya Lily flor! ¿No me has extrañado todas las vacaciones? Porque yo a ti si – dijo el castaño haciendo uso de todo el encanto Potter mientras se acercaba a la pelirroja, lo que hizo contener una risa estruendosa a Melody por el parecido que tenia con su hermano cuando usaba esas tácticas con las chicas, las cuales más de una vez le habían funcionado -

– Potter agradecería que te alejaras – dijo un pelinegro con el cabello ligeramente grasoso, de voz ligeramente gruesa, cargada de fastidio y una nariz ganchuda, lo que hizo que Melody abriera los ojos ante la realidad que estaba viviendo...

Ya no era hipotético el conocerlos, estaban frente a ella, estaba conociendo a muchas personas de golpe, de un momento a otro el aire comenzó parecer insuficiente y el sentimiento de ahogarse la invadió, todo estaba haciéndose muy real, una cosa era tener una idea de que hacer, pero ya estaba ahí... Instintivamente llevo una de sus manos a su relicario y otra a la mano del castaño que estaba cerca de ella.

– Pero vean a quien tenemos aquí, a Quejicus – se les unió el oji plata, incapaz de dejar a su casi hermano solo en lo que parecía ser una futura discusión -

– No le digas así Black – contrataco la pelirroja-

Y antes de que la disputa continuara se escucho como se generaba un golpe seco. Melody había caído de rodillas, entrando en un ataque de pánico mientras era sujetada por Remus.
El cual no terminaba de entender que le sucedía a aquella chica y porque tenía una necesidad de proteger a aquella chica.

– ¡Hey! ¡Hey! Mírame, todo estará bien – dijo Remus tratando de calmar a la peli negra, que cada segundo parecía tener una respiración más errática-

– ¡Por Merlín! Lunático ¿Qué paso? – dijo Sirius auténticamente preocupado por la chica mientras se acercaba a los mencionados-

– ¿Qué le hicieron? – inquirió una preocupada Lily al percatarse que aquel grupo de chicos no estaba solo, sino que con ellos estaba una chica, de apariencia menuda, delicada y pequeña, de forma automática sus piernas se movieron haciendo que esta ingresara por completo al vagón, empujando al oji gris en su afán de acercarse a la chica-

– No hicimos nada, ella ... ¿No dijo su nombre o si? – dijo el oji azul de forma tímida al oji plata el cual negaba mientras trataba de buscar en su mente el nombre de la chica frente a ellos

– No aun no... - confirmo el castaño aun sosteniendo a la chica

– No lo volveré a repetir ¿Qué le hicieron a la chica? – dijo una furiosa pelirroja, sabia que los merodeadores no harían nada para dañar a alguien, pero su preocupación ante la palidez de la menor la estaba comiendo viva

Una melodia al pasado || Sirius BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora