NO TAN HETEROSEXUAL [ CHAELISA ]

11

No podía ser, en serio que no podía ser. Digo, no es que yo viviera mal económicamente, pero esto, era de otro mundo.

—Tú no vives aquí, ¿verdad? —la miré— ¿Es una broma?

—Si me disculpan, yo sí voy a entrar —habló Jisoo.

—¿Podrías cerrar los ojos al pasar? —preguntó ella, y aunque lo dijo en un tono de broma, parecía un poco avergonzada ante esto.

¿El porqué de mi reacción? Literalmente, la casa de Lalisa, parecía una mansión.

Entré con algo de vergüenza y vi a Jisoo subir rápido las escaleras, sentí un leve empujón de Lalisa sobre mi espalda.

La miré confundida. —Rápido, corre hacia arriba —susurró. Lo iba a hacer sin rechistar, pero algo me detuvo.

—¡Ala! ¡Lili otra vez entra en silencio a la casa! ¡Le diré a papá!

—¡No! —Lalisa persiguió a aquel chiquillo cuando comenzó a correr y logró atraparlo, cayendo de rodillas al suelo, tapando su boca y reteniéndolo contra su pecho.

El niño me miró directamente, pero no se veía asustado, más bien, parecía divertirse.

—Si le dices a alguien que yo estoy aquí, juro que te sacaré los dientes y te arrancaré las uñas para hacértelas comer como viej chimuelo.

—¡Mmmh! —ahora sí miró con pánico.

O el chiquillo era muy crédulo, o Lalisa realmente cumplía lo que decía.

—¡Ahora corre fuera de mi vista!

El pequeño huyó, saliendo de ese enorme recibidor.

Ella se paró y vino hacia mí.

—Vamos a mi cuarto antes de que-

—Lalisa, qué sorpresa.

—¡Mierda! —tomó mi mano y me obligó a correr escaleras arriba. Dios, el tapizado que las cubría seguro valía más que mi casa.

—¡Para! ¡¿Quién es ella?!

—La mamá de Beomgyu.

—¿Y la tuya? —él no contestó.

Cuando sentí que estaba a punto de morir, llegamos al segundo piso y corrimos otro poco por el pasillo hasta entrar a la habitación.

Me sostuve sobre mis rodillas y traté de recuperar el aliento.

—Tardaron, ¿qué pasó?

—Beom y Yunha.

¿Yunha? ¿Su madre no era Sora? Esperen, ni siquiera la llamó su madre.

—Uy —Jisoo sólo contestó eso y me miró— ¿No está bonita la habitación de Lili?

—Parece una casa extra.