De cuando Draco botó a Harry

Acto 4

Ginny no pudo hablar con Harry hasta días después, ya que los días posteriores a su plática con Draco salieron de vacaciones. Ese era el motivo por el cual se encontraba en la casa de los Potter, aunque no estaba dentro de la casa en sí, sino que estaba en el jardín de la parte posterior.

- La puerta no se va a abrir con un Alohomora, así que te recomiendo que toques.

- Está bien, tía Lily, gracias por avisar.

Dicho esto, procedió a tocar la puerta de un remolque que había en el jardín de los Potter.

- ¿Quién es ...? – se escuchó el grito de una señora mayor.

- Sé que eres tú Harry ...

En eso se abre la puerta y la señora Figg aparece desde dentro con unos utensilios de limpieza en la mano, dejando perpleja a Ginny.

- Gracias señora Figg...

- De nada querido – respondió ella contenta.

Harry se recostó en la entrada del remolque dándole una mirada galante a Ginny.

- Adelante ... - dijo y le hizo una señal con la mano para que ingresara.

Ginny solo lo miro desconcertada, pero ingreso de igual manera. Una vez dentro le dio una mirada a todo el lugar, ya que antes nunca había entrado.

- Así que aquí es donde vives ...

- ¿Tan mal está ...?

- ¡No! ... está lindo ... solo que ... no es usual que los chicos vivan en un cámper en el patio de sus padres ...

- Bueno es que ... mis padres dicen que mientras viva bajo su techo ... debo seguir sus reglas ... además este es mi propio espacio ...

- Oh ... entonces ... tu techo ...

- Mis reglas ... - respondió sencillamente.

- Tengo una duda ...

- Dime

- La señora Figg ... ¿Qué hacía dentro ...?

- Oh bueno ... es que aún no tengo edad para hacer magia fuera de la casa y mis padres no quisieron ampliar las barreras ... por eso la señora Figg viene a limpiar de manera muggle y yo le pago con mis ahorros ...

- Oh ...

- Si, oh ... y ...

- Y ... te peguntas seguramente ... ¿Oh ... que hace aquí? ¿Qué querrá? – dijo Ginny fingiendo tener una voz masculina.

- ¿Así hablo yo ...?

- No, solo es mi voz genérica de hombre ...

- Ah ... me gusta, habla más – le respondió mientras comía una manzana y tomaba asiento.

- De acuerdo ... ah, oye viejo ¿por qué no regresas con Malfoy? ¿Si me comprendes ... no? – contesto fingiendo la voz nuevamente.

Harry cambio de posición a una más recta y seria, para preguntar.

- ¿Tú crees que deba volver con Draco?

- Ajam ...

- ¿Por qué?

- Porque ... él es ... - se pasó una mano por el cabello, mientras pensaba – tú sabes ... ¿único ...?

Harry se paró de golpe y le hizo otra pregunta.

- ¿Te digo algo?

- ¿Qué ...?

- Estoy feliz de que termináramos ...

- ¿Por qué?

- Porque ... no recuerdo cuando fue la última vez que él hizo algo lindo por mí ...

- Haber, por favor ... acaba de ser tu cumpleaños ... ¿no te regalo nada de cumpleaños ...?

Harry le dirigió una larga mirada seria y se acercó caminando lentamente hacia ella.

- Me obsequió una tarta de melaza ... y ni siquiera fue capaz de disimular un poco, o al menos fingir que era algo que había planeado ... se acercó a mí, llamo a un elfo y ordenó que le traiga una tarta de melaza, de las que sirvieron en el almuerzo ...

🌼❤️