SERENDIPIA ZODIACAL

LA CALMA DESPUÉS DE LA TORMENTA

- si muchas gracias por entender director- colgó la llamada soltando un suspiro

Afortunadamente el director se había tragado la mentira de que todos en la casa pescaron un resfriado el cual se contagiaba muy rápido, por lo cual se pusieron en cuarentena inmediata. Al parecer solo se lo había creído por el hecho de que Virgo, uno de los estudiantes más responsables que se pueda conocer, le había informado

Se levantó con algo de dificultad de la cama -ya que Escorpio lo había subido para hacer una llamada, el chico se ofreció a traerle el celular, pero este se negó pidiendo que fuese subido a su habitación- agarrándose de dónde pudiese y haciendo un desastre a su paso, tirando cualquier objeto que se le cruzará por el camino

- hey hey- Escorpio llegó con una taza de café en la mano- tranquilo yo te ayudo- pasó el brazo de Virgo por su hombro ayudándole a caminar mejor- te ves mejor que anoche- dió una pequeña sonrisa ante este hecho

Le alegraba saber que su mejor amigo al menos estaba un poco mejor, sin embargo, también contaba con la inseguridad e inquietud sobre su situación; qué sería lo que pasaría cuando Virgo recobre la razón y se de cuenta que había puesto a todos en peligro? Lo echaría de la casa o solo quedaría como un amargo recuerdo? Se cual fuere la respuesta lo aceptaría, puso a todos en una situación que nos les hincumbía y para rematar el estaba divirtiéndose

- cómo está Tauro?- preguntó, no lo había visto desde anoche, le preocupaba, y mucho, el estado en el que se encontraba ayer era pésimo, no tanto como el suyo claro pero a él no le importaba nada más que Tauro

- dejó de escupir sangre pero ahora está con una fiebre que te cagas- lo último provocó que Virgo quisiera ir corriendo a dónde sea que se encontraba su novio, por consecuencia se tambalearon ambos y Escorpio por poco lo moja con su café- tranquilo, está siendo cuidado por Sagitario, hace lo mejor que puede- le informo

- llamen a un doctor- dijo de manera cortante observando el piso

- qué?

- que llamen a un puto doctor o llevenos al hospital- miró a Escorpio a los ojos, sus ojos demostraban lo cuan enojado estaba con la situación

Eso tensó al pelinegro, estaba enojado con la situación, era más que claro que en esa casa no se quedaba

- y bien?- Virgo tajante lo sacó de sus pensamientos- lo llamarás o traerás a Sagitario como enfermera todo el santo día

- ah si, espera aquí- salió corriendo no sin antes dejar al de lentes, quien ahora estaba sin ellos, en una posición cómoda- Leo ven ayuda a Virgo a bajar!- gritó

Leo ya había despertado? Se preguntó mientras se sostenía de la pared como podía, sus dedos aún seguían frágiles después de que su mejor amigo los “acomodara”

- Virgo!- se acercó rápidamente a él pasando el brazo del contrario por su hombro, como lo había hecho Escorpio anteriormente

- Leo...- esbozo una sonrisa, saber que alguien estaba bien le reconfortaba- cómo te encuentras?

- bien, Escorpio me mandó a limpiar mi mierda- observó su ropa, un conjunto demasiado grande que le colgaba, era como si un gigante le hubiera prestado su ropa, esta estaba sucia de polvo, probablemente las cenizas de aquellos tipos, se asustó alejándose a tropezones- tranquilo, son solo restos de humanos carbonizados- bromeó, sin embargo el contrario no lo tomó así, claro, quién lo haría?- mala broma? Si, mala broma

Ambos bajaron hasta llegar a la cocina, ya ahí Leo tranquilamente le preparó el desayuno a Virgo, como si todo lo de anoche solo había sido una pesadilla colectiva