SERENDIPIA ZODIACAL

LOS CUARTOS

NARRA.CÁNCER
Por fin era el día de abandonar esta casa tan vacía y comenzar otra vida desde cero, no más Cáncer tímida y aburrida, no más agobios por mi hermana desaparecida, no más está casa en lo que lo único que saben hacer es lamentarse por una pérdida cuando tienen más por delante. No es por ser mala o sínica, pero ya me cansaba de vivir en una casa donde lo único que se siente es la depresión, no recuerdo la última vez que cenamos todos juntos, o la última vez que salimos en familia; la desaparición de mi hermana causó un gran impacto en la familia, pero ahora ya no tendré que vivir ahí, puedo hacer lo que yo quiera sin sentirme culpable

Sonó mi teléfono

~ diga?- normalmente diría que pasa? o ni siquiera contestaria pero recuerdo que estoy cambiando

~ Cáncer, soy yo Virgo, te quería avisar que estoy con Tauro y llegaremos por ti en unos 10 minutos

~ si, está bien

~ ya tienes tus maletas listas

~ ya sabes la respuesta nene- intente sonar atrevida pero creo que no debí ya que es un poco apresurado para cambiar de actitud repentinamente

~ Cáncer... te encuentras bien?- se escucharon algunas risas al otro lado de la línea

~ por que no lo estaría?- no me gustaba que se burlaran de mí

~no por nada, te veo en 10- colgó y me dispuse a bajar con mis maletas para estar lista y sólo salir e irme

Ya estando abajo vi a mi madre haciendo el desayuno para ella y a mi padre viendo un partido de fútbol americano mientras tomaba

- al menos puedes fingir que te importa?- preguntó un poco molesta y decepcionada

- quien?, mi hermana? claro que me importa pero al menos yo quiero dar vuelta a la página y seguir mi vida, no como ustedes- respondí furiosa

- creeme, yo ya he dado vuelta desde que declararon que estaba muerta, no se puede rezar por un muerto- respondió papá sin quitarle la vista a la pantalla

- eso es por que no les importa su desaparición ni su muerte- escupió furiosa- vieron el maldito ataúd sin su cuerpo?- su voz se le quebraba- era como sólo enterrar una vacía caja que no contenía nada, ni su cuerpo ni su alma por lo menos- y empezó a llorar- sólo una puta caja vacía

- ya mamá, deberías tranquilizarte y tomar tus antidepresivos- le pase el bote de pastillas

- estas pastillas sólo calman el dolor, más no lo sacan de raíz- me las quitó y las tiro en el cesto de basura- prefiero mil veces ser una maldita depresiva que aún no supera la desaparición de su hija a ser una mujer que intenta ser feliz con medicamento en vez de voluntad propia

Y está era la razón por la cual admiraba a mi mamá, siempre daba su opinión y punto de vista sin importar que; nunca dejaba que la pisotearan, hasta yo diría que la discriminación de género la llevan los hombres, claro, por parte de ella

Sonó el timbre y fuí a abrir la puerta dejando ver a un Virgo nervioso parado en esta

- hola..- dijo tímidamente- lista para este cambio

- más que nunca- sonreí

- hola Jefrey- saludó a mi papá

- hola hijo, que tal tu madre?, ya mejor?- lo miró y después regreso su mirada al televisor

- si, gracias por preguntar

- me alegro- la mamá de Virgo trabajaba para mi padre en una  empresa de diseño de  interiores, era su mejor trabajadora y siempre podía contar con ella, pero su embarazo no ayudó mucho que digamos y a tenido complicaciones tanto laborales como médicas