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Seung Jo se sentía cohibido al mismo tiempo que dos emociones lo dominaban internamente: la felicidad y la frustración. ¿Cómo rayos habían terminado acá? ¿Cómo fue que logró estar sentado enfrente de su compañera de banco? Estas y más preguntas se hacía Seung Jo pues su querida compañera Ha Ni le lanzaba miradas sutiles y cómplices que lo avergonzaban totalmente, pasado un tiempo la chica hablaba animadamente con su amiga, así que Seung Jo decidió tocar los pies de Ha Ni de modo que pareciera un accidente y tener así la oportunidad de observar su bello rostro, unos minutos más. Sin embargo, lo que obtuvo fue la mirada analítica de esta a la par que una pequeña sonrisa se asomaba en sus labios.
Toqué tus pies debajo de la mesa
quise que pareciera un accidente
pero tus ojos tienen la destreza
de leer mi mente, de leer mi mente.
El chico solo atinó a devolverle una cálida sonrisa al mismo tiempo que bebía soju, pero el licor comenzó a hacer efecto dentro su sistema provocando que este mismo hablara y riera más de lo que habitualmente hacía.
No suelo hablar delante de la gente
y no sé si fue la última cerveza
o si contigo todo es diferente
y perdí la cabeza
cómo puedo hablarte sin hablarte y decir todo
debí ensayarlo, pero ya ni modo.
Ha Ni observaba maravillada la nueva faceta expuesta por su lindo compañero de banco, para nadie era secreto de su enamoramiento hacia este. Seung Jo, en cambio recordaba una y otra vez aquel sueño que tuvo con su compañera.
Flashback:
Ambos chicos se encontraban en una cita, específicamente en un parque poco concurrido de la ciudad, el chico, a pesar de odiar lo cliché y de aparentar frialdad, se había esforzado demasiado para darle a la joven, una cita memorable, en una zona del parque, había preparado con tanto esmero un picnic además de haber comprado un crisantemo rojo y chocolates blancos. Durante su cita, todo iba de maravilla, Ha Ni miraba con fascinación el lugar y sus flores favoritas, hasta que el momento esperado llegó, Seung Jo se puso de pie y sacando los chocolates de aquella pequeña cesta le dijo.
—Ha-Ha Ni —suspiró pesadamente al mismo tiempo que se maldecía por tartamudear ante la dulce chica— Tú me gustas desde hace tiempo y me gustaría pedirte formalmente que fueras mi novia —dicho esto, cerró los ojos fuertemente, preparándose para la burla y el rechazo, humillándose, más en cambio, se llevó con la grata sorpresa de unos labios que tocaban delicadamente los suyos, al abrir los ojos vio a Ha Ni sonriéndole de la manera que ella sabía sonreír.
—Oh, Seung Jo ¡Claro que quiero ser tu novia! —repetidamente besó los labios de su ahora novio y reía alegremente cada vez que este se sonrojaba.
Fin flashback
Yo sé que tú, tú sientes algo por mí
por qué negar este amor si lo confirman tus besos
yo sé que tú no estás aquí por error
si estoy muriendo por ti, que me revivan tus besos.
De repente fue sacado de su ensoñación por la chica, quien lo miraba entre maravillada y extrañada, Seung Jo volvió a sonreírle.
Porque si tú no te vas conmigo
no te vas conmigo
no te sorprendas si nunca, nunca jamás te olvido.
Porque si tú no te vas conmigo
no te vas conmigo
a menos de que me encuentres, yo seguiré perdido.
El tiempo pasaba y Seung Jo se sentía afortunado, estaba disfrutando verdaderamente de la celebración junto con sus compañeros, él se quedó perdido en el perfil de aquella bella castaña, observó detenidamente sus ojos cafés, su nariz recta para descender su vista hacia sus delgados y rosados labios, los cuales le incitaban a probarlos.
Como se perdieron las estrellas en la madrugada
como mi corazón en tu mirada
como se pierden las palabras cuando
que te digo que te quiero y no me sale nada.
Pero su misión quedó truncada debido a una mirada que lo miraba fijamente, dicha acción, volvió a avergonzarlo al darse cuenta que la chica lo había descubierto, se sentía perdido y así se seguiría sintiendo, si no fuera por la cálida sonrisa que le fue brindada.
Y sé, que esto no es casualidad lo sé
eso que se siente y no se ve
solamente pasa si el amor es de verdad
y la verdad es que te pasa a ti también.
Yo sé que tú, tú sientes algo por mí
porque negar este amor si lo confirman tus besos
yo sé que tú, no estás aquí por error
sí estoy muriendo por ti, que me revivan tus besos.
Esta cálida sonrisa le permitió a Seung Jo, enfocarse nuevamente en la chica, ambos jóvenes se encontraban justamente en una íntima atmosfera, donde sus miradas transmitían todo lo que sentían, sin que alguien procediera a interrumpirlos.
Porque si tú no te vas conmigo
no te vas conmigo
no te sorprendas si nunca, nunca jamás te olvido.
No te vas conmigo
no te vas conmigo
a menos de que me encuentres, yo seguiré perdido.
Finalmente, Seung Jo, le volvió a tocar los pies debajo de la mesa al mismo tiempo que le susurraba "te espero afuera"
—¡Gracias, por esta velada! Ya es tarde, hasta luego. Cuídense —dijo esto en voz alta para despedirse y desaparecer por la puerta del restaurante. Minutos después, llegó su acompañante.
—¿Nos vamos? —recibió un asentimiento de cabeza, ambos caminaron... Hoy era su noche de suerte.
Toqué tus pies debajo de la mesa
tú sabes bien que no fue un accidente.
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