Hola chicas, me disculpo por la demora, este es un pequeño regalito atrasado por navidad. Espero que se la estén pasando muy bien en compañía de su familia. Espero actualizar pronto con las demás historias.
Felices fiestas y próximo año nuevo. Disfruten
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¿Se puede sobrevivir a una humillación pública?
Se encontraba observándose en aquel gran espejo, aquel vestido blanco que le quedaba divino; no podía sentir nervios, no, los nervios no eran permitidos para este maravilloso día pues finalmente se convertiría en la señora Baek, después de mucho sufrir, hoy finalmente lo lograría, por lo que permitió soñar despierta, imaginar su feliz matrimonio junto al "amor de su vida" una bella casa y unos preciosos niños que traerían alegría al matrimonio, pudo seguir su ensoñación si no fuera por la voz de su madre.
—¡Vamos Hae Ra, se hace tarde! —la mencionada volteó a ver a su madre para asentir rápidamente, darse una última vista y bajar a toda prisa para subirse a la limosina que la llevaría a la iglesia.
—Madre, tengo un buen presagio para el día de hoy, nada puede fallar —comentaba alegremente la chica.
—¡Ojalá sea así, hija mía! —suspiró pesadamente para comentar cuidadosamente —Aunque yo no creo que ese joven sea el indicado para ti. —La joven novia abrió la boca indignada ante el comentario de su madre.
—¡Patrañas! Por favor madre, no arruines este día tan especial para mí, te lo pido —la mujer se resignó, no podía arruinarle a su hija su gran día.
Él no dejó tiempo para arrepentirse,
Mantuvo sus labios húmedos
Con su antigua apuesta segura
Yo con mi cabeza alta y mis lágrimas secas
Sigo adelante sin mi hombre
Hae Ra y su madre llegaron a la iglesia, donde los Baek, la prensa y sus amistades más cercanas los esperaban con emoción, contentos de presenciar la unión legal de tan hermosa pareja. Hae Ra se sorprendió al ver a Seung Jo, de pie junto a la limosina, asombrada y un tanto apenada se bajó del vehículo. No podía creer que su futuro marido la estuviese viendo antes de la boda. Sin embargo, sus palabras quedaron atoradas como un nudo en su garganta cuando inesperadamente Seung Jo le besó, pero no era un beso dulce, al contrario, era un beso con sabor a hiel y arrepentimiento, aunque esto no fue obstáculo para corresponder aquel beso.
Tú volviste a lo que sabías tan alejado
De todo por lo que pasamos
Y yo recorro un camino problemático, llevo las de perder
