POCO A POCO

17 3 4
                                    

POV ARIZONA.
Estaba parada apunto de tocar la puerta que estaba frente a mi, tomé una respiración profunda, levante mi brazo y fue entonces cuando esta se abrió de golpe, recibiendo una mirada de extrañeza por parte de Ángeles.
ARIZONA: Hola...-sonreí débilmente.
ÁNGELES: ¿Que haces aquí?, se supone Que desapareciste.
ARIZONA: Bueno, ahora estoy aquí-me encogí de hombros.
ÁNGELES: ¿Por que te fuiste?-preguntó algo preocupa-Me prometiste no volver ha irte.
ARIZONA: Lo se-cerré los ojos un momento-Por eso estoy aquí...quiero explicarte todo, ¿Puedo pasar?-miré dentro del departamento.
Ella abrió más la puerta, yo entre observando todo a mi alrededor, no se parecía en nada a su viejo departamento, ahora es más casual, pero sigue manteniéndose elegante.
ÁNGELES: Te escucho-llamo mi atención haciendo que volteara, tomé todo el aire que tenía y descanse mis hombros.
ARIZONA: Me fui por ti-hable firme.
ÁNGELES: No entiendo-dijo confusa.
ARIZONA: Para ser más específica, me fui porque me di cuenta que estoy jodida, por ti-me acerqué a ella- Por que cuando te vi la primera vez después de mucho tiempo solo podía pensar en tenerte y nunca volver a soltarte-acaricie su mejilla con la palma de mi mano.
ÁNGELES: ¿Por que me estás diciendo todo esto?...
ARIZONA: Porque es la verdad Ángeles...
ÁNGELES: Aún así, no puedes hacer nada-negó con la cabeza.
ARIZONA: No estoy tan Segura de eso-tomé su rostro con ambas manos-Solo dame tiempo-supliqué.
ÁNGELES: No puedo-bajo la mirada.
ARIZONA: ¿Por que?
ÁNGELES: Estoy saliendo con Teresa...justo iba a verla pero tú, viniste.
Todo mi cuerpo se tensó de inmediato, me alejé un poco tratando de procesar lo que me dijo.
ARIZONA: Ángeles...por favor, no me hagas esto de nuevo-se me llenaron los ojos de lagrimas.
ÁNGELES: ¿Y que esperabas, Arizona? Tú no...me dijiste que te esperara, al contrario, fuiste muy clara con respecto a nosotras y luego te fuiste, así que pensé en seguir mi vida.
ARIZONA: No, no te lo dije y si tienes razón, fue mi error, pero tú no puedes estar con Teresa.
ÁNGELES: ¿Ah si? Y ¿Por que no?-subió la voz.
ARIZONA: Porque yo te amo-me acerqué otra vez pegando nuestras frentes- Y se que tú también me amas.
Me acercaba lentamente a ella, temiendo de que en cualquier momento De mandase al carajo.
ARIZONA: Amo cada parte de ti-Enredé mis dedos en su cabello- Amo que contigo todo es mejor, amo como me haces sentir y te he extrañado tanto-besé delicadamente su mejilla-No puedo dejarte ir otra vez-la mire a los ojos suplicante.
Ella se apartó de golpe.
ÁNGELES: Me tengo que ir.
Agarró su bolso para después dirigirse a la puerta.
ARIZONA: !No!-la tomé del brazo impidiendo que se fuera.
ÁNGELES: Arizona suéltame, no puedo estar un segundo más aquí contigo.
ARIZONA: ¿Por que?-pregunte sería.
ÁNGELES: Porque no podemos-miro hacia otro lado-Ambas sabemos que no podemos....
La besé de golpe, al principio trató de alejarme pero después se rindió, mis manos recorrieron sus hombros para después tomar firmemente sus caderas acercándola aún más a mi, termine el beso alejándome solo unos centímetros.
ARIZONA: Todavía no me has dado una buena excusa-le dije agitada, ella me miro de abajo hacia arriba, intentado estabilizar su respiración.
ÁNGELES: Cállate y cógeme.
Me beso desesperadamente, agarre sus piernas poniéndolas a horcajadas sobre mi llevando hasta el sofá, donde la acosté, sus piernas abrazaban mi cintura mientras nuestras lenguas bailaban deliciosamente, desabotonaba su camisa lentamente, me tomé unos segundos para mirarla, roce mi nariz con la de ella en un acto dulce que hizo aumentar los latidos de mi corazón.
ARIZONA: Mía-la tome de la barbilla, ella sonrió antes de pasar su lengua desde mi clavícula hasta llegar a mi boca dándome un beso rápido.
ÁNGELES: Toda tuya....
-¿Has tenido sueños que afecten tu estado de ánimo?
Llamo mi atención la mujer que estaba en frente de mi, era mi primera sesión y simplemente no tenía ánimos de concentrarme, mi cabeza daba vueltas con las imagines de mi sueño, estoy siendo perversa conmigo misma, torturándome hasta ya no poder más.
ARIZONA: No-respondí seca viéndola a los ojos.
-Mientes.
Le sonreí lentamente, para después colocar una pierna encima de la otra tratando de acomodarme.
-No quiero presionarte, entiendo que esto puede ser incómodo la primera vez.
ARIZONA: Si lo es-asentí- Pero yo...necesito estar bien-baje la cabeza.
-Bien pues, debes saber que lo que hablamos en esta sala se quedará aquí, si no estás lista para contarme una cosa pasaremos a otro tema hasta que lo estés, tienes mi número telefónico, puedes llamarme en cualquier momento si no te sientes bien o te surge una duda.
ARIZONA: Entiendo, es solo que...no suelo hablar con una extraña de mi vida privada.
-Bueno, paso a paso-dijo antes de escribir en su agenda-Pero si te aconsejo que seas honesta, sobretodo contigo, escucharte, ya que quizás muchas cosas que piensas no lo dices en voz alta, yo en ningún momento te voy a juzgar, en ningún momento voy a obligarte a nada, tú decidiste venir y debes saber que diste el primer paso para mejorar...a veces es mejor contarle cosas a un extraño, es más fácil.
Asentí, respiré muy hondo y solté el aire despacio, no quería echarlo a perder, Charlotte estaba afuera esperándome, no quería hacer esto sola, quería seguridad y ella me la estaba dando, así como mi terapeuta.
ARIZONA: Si...anoche soñé algo-descanse los hombros.
-Muy bien, ¿Fue algo bueno?
ARIZONA: Si, lo fue.
-Okey-hubo un silencio incómodo-Sabes...para la próxima sesión necesito que traigas una lista.
ARIZONA: Lista, ¿Sobre que?-pregunte confusa.
-Sobre tus posibles traumas.
ARIZONA: ¿Tienen que ser en orden?
-No, puedes escribirlos como quieras, así será más fácil.
ARIZONA: Bien-me encogí de hombros, me levante y ella también lo hizo-Entonces...hasta la próxima sesión-le extendí mi mano-Fue un placer.
-Mi secretaria te informará cuando puedes venir otra vez, por ahora no voy a hacer ningún ejercicio ya que no sabemos quién o qué es lo que provoca que estés a la defensiva todo el tiempo.
ARIZONA: Es no es verdad-subí el tono de mi voz.
-¿Segura?-preguntó divertida, yo no dije nada y solo me dirigí a la puerta-No lo olvides, la lista es importante, que tengas un buen día Arizona.
Salí de la consulta, luego agende la cita, tendré que venir la próxima semana.
CHARLOTTE: ¿Que te dijo? ¿Que le dijiste?-dijo levantándose de la silla cuando m acercaba a ella.
ARIZONA: Nada, solo tenía que escribir una lista sobre mis posibles traumas.
CHARLOTTE: ¿En serio? ¿Solo eso?-se cruzó de hombros-llevabas más de 45 minutos ahí.
ARIZONA: Lo se, pero quizás no puse la suficiente atención, sabes que me cuesta expresarme-Ella me acaricio el hombro.
CHARLOTTE: Si, ya lo sé.
ARIZONA: Además dijo poco a poco y eso está bien para mi-nos quedamos unos minutos en silencio, hasta que yo hablé-¿Nos vamos? Podríamos ir a comer ha alguna parte-levante una ceja divertida.
CHARLOTTE: Si está bien, pero esta vez yo pago el almuerzo-sonrió.
ARIZONA: Está bien-dije dándome por vencida.
QUERIDOS LECTORES, LAMENTO MUCHO NO ESTAR SUBIENDO CAPÍTULOS SEGUIDOS, HE TENIDO ALGUNOS INCONVENIENTES, ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y GRACIAS POR SEGUIR MI HISTORIA.

¿ME QUEDO CON MOLLY? (PART.2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora