¡Es Solo Un Niño! [Mikey×Tú]

CAPITULO 2

Después de otros 3 meses. Alrededor de las 6 de la tarde, nuestras queridas tortugas estaban cada quien en su mundo, Leonardo viendo su serie favorita, Donnie trabajando en un T-Phone para [____].

Debido a petición del líder, quienes habían notado que una pequeña tortuga se tornaban ansiosa ante la ausencia de nuestra protagonista.

Y debían evitar los constantes escapes que Mikey hacía por saber de lo que parecía ser su mejor amiga o posible crush, no querían que le pasará algo malo. Y en eso todos estaban de acuerdo.

En especial Raphael, quien aunque no lo admitiera desde que toda esta situación empezó, tanto de los escapes como lo que parece un posible amorío entre su hermanito y aquella chica, había estado más al pendiente del menor.

Por no decir que parece su sombra. Y refiriéndonos de Raphael, él se encontraba en su habitación con Spike. Mientras que Mikey estaba patinando.

Así que continúo hasta que se escuchó un par de voces provenir de las alcantarillas.

Cuando se alcanzo a ver quiénes eran, no sé alcanzó a decir nada, ya que la tortuga de bandana naranja exclamó: "¡[_____]!" mientras corría hacia su dirección para abrazarle.

La mayor solo alcanzó a dar varios pasos hacia atrás, colocando toda su fuerza en sus piernas para no caer, ya que cabe mencionar que tanto ella como April, llevaban varias cajas de pizza.

— ¡Mikey! —. Chilló cuando sintió el peso de aquella tortuga desequilibrarle, se tambaleó por varios segundos. Para finalmente caer de sentón en el suelo.

— Oops, perdón, perdón! Solo que si viniste, te extrañé! —. Dijo el menor sin pena alguna, alzando la mirada recostado en el regazo de la mayor, mientras la abrazaba por la cintura.

La contraria solo suspiró para devolverle la mirada a aquellos ojos inocentes, negando divertida.

— Solo han pasado dos días desde la última vez que nos vimos —. Soltó una pequeña carcajada. — Pero bueno, no importa. Acaso no quieres pizza? —. Al mencionar aquel preciado alimento, Mikey se reincorporó de inmediato.

Para ayudar a la contraria a levantarse, mientras ayudaba a levantar las cajas que se habían caído de las manos de [____].

Era obvio que todos se percataron de esto, soltando pequeñas risas, inclusive el Sensei. Quien salía de entre los pasillos, para compartir con los demás presentes esa mirada burlona o delatadora, ante el gesto del menor.

[_____] se percato de esto mientras que Mikey estaba perdido entre la pizza. Así que solo sonrió mientras se rascaba la nuca.

No podía negar que su interacción con el menor de las tortugas era cada vez mayor que con el resto de los presentes, y claro se estaba tornando de manera diferente.

Claro refiriéndonos en el buen sentido, sin embargo ella dudaba de si todo esto era en el sentido amoroso hacia el otro o más en amistad, por el comportamiento infantil y alegre del menor, que era habitual en él.

Suspiró mientras comía pizza junto al mencionado mientras que en ocasiones se topaba con ciertas miradas que le observaban de manera curiosa ¡Inclusive del Maestro Splinter!

No pudo evitar removerse en su asiento algo ruborizada, acaso todos creían que entre él y ella había algo?

— Y justo yo le llegó por la espalda, lo tiro y justo después Raphael... —. Explicaba emocionado el menor de las tortugas, moviendo sus brazos y haciendo gestos comentando cada acción de la misión completada días atrás mientras todos escuchaban atentamente mientras las tortugas se enorgullecían de su logro.

Después de todo esto, llegó el momento de despedirse, estaba comenzando a anochecer. Y aparte de que April había quedado en llegar temprano, [____] debía trabajar el día siguiente.

Se despidieron como de costumbre, no sin antes que el menor intentará que la protagonista se quedará, sin éxito.

Ya una vez entre las calles, cada vez más solitarias mientras más tarde se hacía, April no sabía cómo meter el tema de Mikey en la conversación.

— ¿Ocurre algo, April? —. Dijo [____] de manera suave, mientras cruzaba sus brazos debido a la fresca ventisca. — ¿Es sobre Mikey? —. Soltó para sonreír al haber dado en el blanco, la pelirroja solo soltó una pequeña risa nerviosa. Al no llevar tanto de conocerse, April creía que no tenían tanta confianza pero eso a [____] no le importaba.

— ¿Tan obvio era? —. Dijo soltando una risa más. — Ya sabes lo que voy a decir pero es solo que es tan obvio! Valga la redundancia. Pero aún así lo voy a preguntar... —. Dijo April, mirando a la contraria como si pudiese permiso, conteniendo cierta emoción. — ¿Te gusta Mikey? —. Soltó al ver cómo la mayor asentía.