Green light || Jilix

〄 Capítulo 02

-Oye, mira esto. ¡La foto de la chica de la semana es tu preciosa Jihyo!

-Oh, ¿en serio? ¡Déjame verla!

Fui distraído de mis recuerdos de hace cinco años y regresé al presente al escuchar un par de voces alegres.

Estuve bastante distraído... por un momento, no recordaba lo que hacía, pero lo hice cuando vi la escoba en mi mano. Ya era la hora de salida y era el momento del aseo. Estaba encargado de nuestro salón del décimo grado y mi maestra guía la señorita Park, (impertinentemente tratada por la clase como "Ilhada") era muy estricta al revisar los resultados.

Cuando el salón de Ilhada estaba ligeramente sucio, te obligaba a limpiarlo todo otra vez, así que todos odiaban cuando era su turno de estar a cargo.

Odiaba la limpieza como cualquiera, pero hoy quería llegar temprano a casa para mirar el programa que había grabado, así que había estado barriendo diligentemente. Sin embargo, en algún momento me distraje por los terribles recuerdos de mi pasado.

¿Los días de primaria me traumatizaron al punto que los recuerdos me persiguen en momentos tan perturbadores como este...? Nah, sólo ocurrió porque la estrella de nuestra clase se encuentra presente, es todo.

-Jihyo es tan linda. Sus hoyuelos son los mejores.

-Sí, claro. Sé que sólo le ves a los senos, Jisung.

-No, no, ¡Me gusta su nuca!

Al escuchar el grito de la estrella, el chico al que llamaban "Jisung", los cinco chicos que lo rodeaban comenzaron a reír. -¡Ja ja ja ja! ¡Qué maniático!

Me le quedé mirando con frialdad al grupo que se encontraba frente a la pizarra. El chico al centro del grupo ruidoso era Han Jisung.

Estaba en la misma clase que yo. Su cabello era negro, brillante y sedoso, y su alto y delgado cuerpo estaba muy bien definido. Tenía enormes ojos redondos, una nariz bien proporcionada, mejillas regordetas, dientes blancos y una complexión que cualquier chica envidiaría.

Tenía una expresión patéticamente idiota en el rostro, pero viéndolo desapasionadamente, era un excelente partido. Su apariencia ortodoxa hacía que el título del "príncipe sobre un corcel blanco" le sentara bien.

-De acuerdo, Jisung, ¿en ese caso no debería ser Mina de tu tipo? -Las voces se detuvieron como si estuviesen discutiendo algo secreto.

Incluso yo, el chico que casi no tenía amigos, conocía el nombre.

Ella era del salón de al lado y recordé que varias personas la habían llamado la chica más bella de la escuela. Sólo la había visto pasar una que otra vez y definitivamente era bella, alegre y también tan popular como Jisung.

Ahora que lo analizo, había rumores de que Mina y Jisung estaban saliendo juntos. Aunque no es que yo supiera su veracidad.

-Pero Mina tiene el cabello largo, ¡Ni siquiera puedes verle la nuca!

-¡Idiota! Cuando una chica de cabello largo se lo levanta puedes ver su nuca y esa es la mejor parte. Es mejor cuando sólo puedes verle un poco, ¿sabes?

-¿Hyunjin acaso también te has convertido de la religión de los admiradores de nucas?

Cuando Hyunjin, el chico al lado de Jisung, comenzó a explicar las razones del porque las chicas de cabello largo eran mejores, el resto comenzó a molestarlo. Hyunjin era inconstante y un tanto superficial, por lo que sus comentarios tontos siempre recibían desagrado o burlas.
Jisung movió un dedo como invitándole a acercarse.

-Las nucas son realmente lindas, Hyunjin. ¡Bienvenido a mi mundo!

-¡Gracias, pero no gracias! ¡Lo que en verdad me gusta son los traseros!
-Gritó Hyunjin con una expresión seria en el rostro.

Sus amigos comenzaron a carcajearse inmediatamente. Que adolescencia tan sencilla la que vivían... debía ser lindo. Amor, amistad y charlas sórdidas, esta era una conversación saludable de estudiantes de preparatoria.

No es que me interesen esas cosas. Las chicas me asustan y no tengo amigos, tampoco soy muy lujurioso. Prefiero programas de televisión y películas que desperdiciar mi tiempo en esas cosas.

Oh, es cierto.

Quería llegar a casa rápido para poder ver el programa de Los Guerreros Oradores Budistas: El Hombre Monje que grabé, pero como estos idiotas están parados frente a la pizarra sin asear nada, ¡todavía me encontraba aquí! Es por eso que odiaba a grupos como este.

Mientras aceleraba mi ritmo de limpieza, me quedé mirando con hostilidad a Jisung y su grupo de seguidores. Sin embargo, continuaron divirtiéndose, hablando de las chicas de los posters y Mina, ignorando por completo mis miradas.