All through the night.

Capitulo 2. (Editado)

 Hermione caminaba aceleradamente por los pasillos sin mirar por donde iba. Esa mañana había sido la peor de su vida. Primero, se había quedado dormida, por lo cual no le daba tiempo desayunar, y segundo no había encontrado su mochila con lo cual tenía que llevar los libros en las manos.No eran tantos, pero eran grandes y pesaban. Había estado a punto varias veces de atropellar a alguien. Pero esta vez si se había chocado con alguien causando un gran alboroto de libros, piernas y brazos. Si, se había caído encima de alguien. Genial lo que le faltaba. Hermione intentó levantarse pero no veía nada al tener el pelo en la cara, y lo único que hacía era resbalarse y volver a caer. Finalmente unas manos les levantó a ambos. Al coger estabilidad Hermione se quitó el pelo de la cara y miró a la persona que había arrollado al suelo. No le podía estar pasando esto, a ella no. Había vuelto a arrollar a Draco Malfoy. Sintió como su cara se teñía de rojo hasta las puntas de las orejas, al más puro estilo Weasley. 

-Lo siento, lo siento mucho...- lo dijo en un leve murmullo, mientras se agachaba a recoger sus cosas, que ahora mismo estaban esparcidas por el suelo. Vio como Draco encogía levemente los hombros a modo de aceptación. Hermione dirigió su atención a los libros otra vez. Creia que Malfoy se habría ido ya, pero cuando se levanto lo tenia delante. Y la estaba mirando fijamente. Hermione se quedó congelada bajo aquellos ojos grises tan inexpresivos. Se encogió un poco, sintiéndose estúpida bajo su atenta mirada. Finalmente el platino habló.

-¿Por qué no pruebas a llevar los libros con un Wingardium leviosa?- Hermione le miro atónita. No se había esperado ese comentario de su parte. Se había esperado mas un "eh Granger, mira por donde vas" o un "genial ahora tendré que desinfectarme para poder ir a clase". Malfoy carraspeó ante la no respuesta por parte de la morena.- Lo digo porque es mas fácil que llevarlos tu misma.- Hermione asintió.

-Esto... umm gracias.- Hermione le miró por ultima vez y se dio media vuelta para ir a clase. Finalmente no hizo lo que le dijo el Slytherin, porque estaba demasiado conmocionada para hacer algo. Tampoco se dio cuenta de que el platino fue todo el rato detrás suya, porque resulta que su primera clase era con la casa Slytherin. Tampoco prestó mucha atención a la clase, ni al nuevo profesor, pero si sentía una mirada clavada en ella. Lo sentía por la manera en la que se le erizaban los pelos de la nuca. Pero no tenia demasiado valor para girarse y mirar quien era esa persona que no apartaba su mirada de ella.

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 Su primer día de clase no fue del todo bien. Desde la guerra algo había cambiado en ella. Ella sabia que ya no era la misma, pero necesitaba aparentar que todo estaba bien. Por eso la hora de comer fue la más dura. Ginny había estado observándola durante todo el día a causa de sus continuos y poco normales despistes. Se forzó a mostrar una exagerada sonrisa y a involucrarse en la conversación. Seamus y Dean estaban comentando algo sobre el nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras.

-Hermione, ¿tú que opinas del profesor ?-Hermione se quedó mirando a Ginny, y torció el gesto.

-Esta bien.-Y se encogió de hombros simplemente. Evitó la mirada de Ginny y sin darse cuenta dirigió su mirada a la mesa de las serpientes. 

Allí encontró a Malfoy totalmente apartado del resto con Theodore Nott a su lado. Ninguno de los dos parecía hablar. Nott comía tranquilamente y Malfoy jugueteaba con su plato de comida. Nott levantó la cabeza y ambas miradas se cruzaron. El platino pareció darse cuenta y se unió al cruce de miradas. Nott enseguida la apartó y siguió comiendo tranquilamente, Draco no. Los ojos grises del Slytherin hacían que Hermione se sintiese incomoda y rápidamente volvió a posar lu mirada en su mejor amiga. Esta la observaba suspicazmente.

-Hermione, no has escuchado nada de lo que te he dicho ¿verdad?- Hermione intentó poner su mayor sonrisa de disculpa y se encogió de hombros. 

-Lo siento estaba pensando en la redacción que hay que hacer para la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras. Creo que voy a ir a la biblioteca a empezarla durante estas dos horas libres que tengo.-Dicho eso recogió sus cosas y se despidió de sus amigos. Ginny no apartó su suspicaz mirada de ella ni un momento. Sabía que le pasaba algo. Y sabía que tenía que hablar con ella.