El partido comenzó frenéticamente.
La escuadra peruana mantenía el control del balón y buscaba oportunidades de gol por el lado de Lapadula, lastimosamente la defensa colombiana siempre lograba interceptar esos pases largos.
A pesar del dominio del esférico, cada vez que Colombia poseía el balón, sin pensar, buscaban concretar mediante Cuadrado y Luis Díaz.
Estaba claro que el partido prometía brindar un sinfín de emociones y pasado el quinto minuto, Lapadula finalmente pudo interceptar el balón. Al instante miró a Cueva y, confundiendo a la defensa, se lo pasó a Sergio Peña, quien vio en Yoshimar Yotún una oportunidad.
La pelota llegó a los pies de Yotún y este remató hacia la portería, pero su disparo se fue alto.
Estaba claro, Perú estaba siendo superior.
Los colombianos se dieron cuenta de ello y decidieron salir con mayor ánimo e intensidad, presionando constantemente los puntos débiles de la defensa y neutralizando a los "tres mosqueteros".
Si Cueva tocaba el balón buscaban entrarle con falta, si era Carrillo lo acorralaban más de dos y a Lapadula nunca lo dejaban solo.
La estrategia parecía funcionar pero la garra peruana no se dejaría intimidar tan fácilmente, todavía contaban con Yotún y Peña, quienes brillarían este partido.
Así pues, consiguieron avanzar y Yotún envió un centro peligroso al área colombiana que Lapadula no pudo alcanzar. Pero eso era lo de menos, sus acciones y el ver como se esforzaba, inspiraba a los demás y ahora, Perú dominaría el partido, el cuál se había convertido en un ida y vuelta constante.
Sin embargo, no podía ser tan fácil. Por regla general nuestra selección nunca tiene partidos fáciles, una misteriosa fuerza siempre empuja contra nosotros y obliga a nuestros amados futbolistas a darlo todo.
Algo le pasa a Tapia, algo le pasó a Tapia. Renato Tapia se encuentra en el suelo.
Una lesión le impidió continuar el resto del partido y Wilder Cartagena entró en su lugar.
Los jugadores aprovecharon para beber agua.
- ¡Batidula! - llamó Cueva que estaba con Carrillo
- Dime - respondió el enmascarado
- Queremos intentar algo -
Se reanudó el encuentro y al cabo de unos minuto la pelota caía sobre André. El defensa empujó el esférico y este llegó a Lapadula quien se la pasó a Cueva y, atrayendo la atención de los defensas, vio la oportunidad.
El tiempo a su alrededor se detuvo y solo Gianluca parecía ser consciente de ello.
El balón era un mensajero y cada pase entre ambos, una conversación en perfecta armonía. Esa era la magia del dúo Lapacueva, la pasión, la confianza y la sinceridad, solo ellos podían percatarse de eso y sin saber lo que realmente sentían lo llamaban amistad.
André se dio cuenta de ello al ver a sus compañeros, sintió como si se alejaran de él y deseó permanecer a su lado, pero no pudo. Él también quería experimentar algo así.
Lapadula recibió la pelota y disparó al arco.
Mete Carrillo, el rebote llega a Lapadula, toca Cueva, la tiene Lapadula yyyyyyyyy, que cerca pasó del arco. La oportunidad más clara del partido y Perú casi se pone por delante, damas y caballeros.
Gianluca no lo podía creer, los sentimientos de Christian lo habían alcanzado pero no supo como interpretarlos. Confundido, se dejó caer al suelo y maldijo para sus adentros.
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🥵👌🏿👉🏿 Amore Proibito👈🏿🍫😳 - LAPACUEVA
RomanceGianluca Lapadula, la medicina a nuestros males, la solución a nuestros problemas, la llama de nuestros corazones, la luz que nos guía y que nos impulsa a seguir adelante. Christian Cueva, trujillano de sangre, el bromista, motivo de nuestras aleg...