VI

1.1K 102 38
                                    

La habitación era llenada por el sonido de la boca de Sunghoon quien ponía esmero en lo que estaba haciendo.

La saliva escurría en gran medida por su barbilla, sin siquiera importarle eso volvió a engullir completamente el miembro de su contrario.

Jay solo podía disfrutar de la excelente mamada que estaba recibiendo de Sunghoon, la imagen que tenía en frente era demasiado excitante.

Se vino con fuerza sin importarle hacerlo dentro de la boca del pelinegro, era su castigo por decirle teñido.

Sunghoon se tragó todo, realmente disfruto de lo que acababa de hacer.

Limpiándose un poco los restos que aún quedaban en la comisura de su labio se levantó del suelo con una sonrisa de completa satisfacción viendo como su mayor se reponía del orgasmo que acababa de tener.

Pronto Sunghoon se encontró con tres dedos en su interior intentando contener sus gemidos.

El pelirrubio volvió a tener uno de los mejores orgasmos de su vida y Sunghoon volvió a sentirse satisfecho, solo un poco.

Jay volvió a disfrutar el dulce sabor de Sunghoon, de su chico.

Intento tomar lo más que pudo, sabía que esa sensación era temporal y pronto volvería a sentirse desolado, sin querer el sabor se volvió amargo.

Aun así le encantaba.

-Sunghoon-ah, por fin llegas-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Sunghoon-ah, por fin llegas-. La voz de su madre salió incomoda. Lo regañarían luego de eso estaba seguro.

El pelinegro solo la miro como tocaba su sien con cansancio. –Podrías decirme ¿Qué hace Yeonjun y sus padres aquí? -. bueno, eso era nuevo, ¿qué hacían ellos ahí?

-Mama te prometo que no lo sé, estoy igual que tú-. Sulli solo suspiro frustrada.

–Llevan 25 minutos en la sala exigiendo hablar los cinco, pensé que no llegarías jamás-. Sunghoon suspiro intranquilo, al menos no lo regañarían.

-Di vueltas por el parque y no vi la hora, perdón-. Su madre solo lo miro con una sonrisa. –Está bien, vamos a la sala quiero que se vallan lo antes posible de mi casa-. El pelinegro solo soltó una leve risa.

Al llegar a la sala los señores Choi junto a Yeonjun estaban sentados en el sofá, esto sería incomodo, demasiado.

-Mi hijo ya se encuentra aquí, ¿qué es lo que querían que habláramos? -. La voz de Sulli salió calmada y pacífica, realmente explotaría en cualquier momento y patearía los traseros de los Choi, el pelinegro no se opondría, incluso la ayudaría a echarlos a patadas.

-Sabemos de lo estúpido e hiriente que fue nuestro hijo en su relación con Sunghoon-. Musito la madre de Yeonjun.

-Realmente estamos arrepentidos de su actuar, no queremos que nuestras familias tengan algún altercado por este motivo-. El señor Choi hablo de forma pacífica de igual forma, solo eran apariencias, como los odiaba.

ᴊᴀᴍ - ᴊᴀʏʜᴏᴏɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora