≈ Para Jay, Sunghoon sabe a mermelada dulce, adictiva.
Jay hará todo lo posible para derramar toda esa mermelada en su boca, aunque sabe que nunca estará satisfecho.
Sunghoon sabe que no está bien, pero aun así se siente tan correcto ≈
➜Smut.
➜Jay t...
El chico frente suyo estaba abriendo y cerrando la boca sin modular palabra alguna mientras tocaba su sien y jugaba con sus manos.
-Sung, ¿estás bien? -. Su voz salió calmada dedicándole una sonrisa intentando que se calmara y hablara.
-No sé cómo paso-. Su voz salió quebrada y de sus ojos salieron lágrimas.
Estaban en un parque, no había casi nadie, el frio era evidente, pero a ninguno de los dos les importaba eso.
-P-paso que Hoon-. Esta vez la voz del rubio salió temblorosa.
-No sé en qué momento me empezaste a gustar tanto que me sofoca, es como si cada vez que te veo siquiera hablar con alguien mi boca se vuelve agria, me siento celoso de no ser yo quien te haga reír-. Sunghoon había soltado todo lo que había guardado en el fondo de su ser por bastante tiempo.
-Sunghoon, cariño, tú me encantas, desde hace bastante, es como si cada vez que estoy contigo me siento completo, siento que puedo hacer y decir lo que sea sin miedo a ser juzgado-. La voz de Jay salió llena de cariño, como si intentara transmitirle cada uno de sus sentimientos al pelinegro.
Sunghoon solo soltó un suspiro y tomo la mano del contrario para dirigirse a una cafetería.
Tomaron asiento y pidieron un café cada uno, realmente hacia frio.
Su tarde se fue entre risas y conversaciones triviales, disfrutando de la compañía del contrario, decididos a no ser estar lejos nunca más.
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Sunghoon llego a su casa con una gran sonrisa.
Camino por el pasillo hacia la sala con tranquilidad, al llegar vio a su madre, hermana y mejor amigo viendo televisión juntos.
¿Qué mierda hacia Jake en su casa?
-¿Cómo te fue?, ¿te declaraste?-. Eso fue directo, típico del australiano.
-Quiero conocer a ese tal Jay pronto jovencito-. La voz de su madre salió divertida.
-Sí, ya lo hice ¿felices? -. Supo que habían quedado conformes cuando lo vio mirarse y sonreírse entre sí.
-Que Winter-. Su hermana lo miro fijamente haciendo que la cuestionara. –Nada hermanito, ¿entonces ahora tienes novio de nuevo? -. Bueno, había otra interrogante, aun no eran novios, habían quedado de seguir saliendo.
-No y tampoco te importa-. Su hermana solo lo miro mal para luego dirigir su atención a su celular nuevamente.
- ¿Y tú?, ¿ya le dijiste a Karina que sean novias o aun te da miedo que te diga que no? -. Sunghoon dibujo una sonrisa triunfante en sus labios.
La puerta fue tocada bajo la atenta mirada de todos los cuales dirigieron su vista al pasillo al lado del salón.
-Yo voy-. Winter se levantó antes de que alguien dijera algo.
