-Capítulo 17-

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Narra Tn

Estábamos ya bastante cerca de llegar al hogar de la señorita Valeria.

Estaba en la parte baja del barco, sentada en el piso y leyendo un libro que encontré, era interesante.

Romeo y Julieta (La excelente y lamentable tragedia de Romeo y Julieta, 1597) es una tragedia y melodrama del dramaturgo inglés William Shakespeare. Cuenta la historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de la oposición de sus familias, rivales entre sí, deciden casarse de forma clandestina y vivir juntos; sin embargo, la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen a que la pareja elija el suicidio antes que vivir separados. La muerte de ambos, sin embargo, supone la reconciliación de las dos familias.

¡ESTE LIBRO FUE ESCRITO HACE TRESCIENTOS CUARENTA Y SIETE AÑOS!

Seguí leyendo hasta que Horace llegó.

Horace: -¿Qué haces? -Me preguntó sentándose a mi lado y observando el libro-

Tn: -Estoy haciendo hechizos, ¿y a ti que te parece?- Dije con una pequeña sonrisa sarcástica-

Horace: -Pues no lo sé, pero eso ahora no importa. Los gemelos me dijeron, que Millard les dijo, que Enoch le dijo a él, que Emma le pidió que te diga, que la señorita Peregrine dijo que ya casi llegamos-

T: -¿No era más fácil decirme solo lo que había dicho la señorita, sin tener que repetir todo lo que dijeron los demás?-

Horace: -Nop, y también venía a decirte... Que te extraño-

Tn: -¿Me extrañas?-

Horace: -Por supuesto, ya casi no pasamos tiempo juntos-

Tn: -¿Y qué insinúas con eso?-

Horace: -Que debemos pasar más tiempo juntos-

T: -Por supuesto, ¿te parece si al llegar al hogar de la señorita Valeria hacemos un pequeño picnic solo para nosotros dos, y pasamos el resto del día juntos?

Horace: -Con tal de estar contigo... Hagamos lo que sea-

Tn: -Entonces, llegaremos, dejaremos nuestras pocas cosas que trajimos al barco en nuestras respectivas habitaciones, y luego iremos a la cocina a ver qué podemos preparar para nuestro picnic-

Horace: -Solamente la idea de pasar una tarde junto al amor de mi vida y comida, ya me fascina-

Tn: -¿Te eh dicho que eres muy tierno y que te amo mucho, mucho, muchísimo?-

Para este momento ya estábamos ambos parados y abrazados.

Horace: -Me lo has dicho hace como... Década y media atrás-
Tn: -¡oye! Eso es mentira-le empujé levemente el hombro-

Horace: -¡Ay! Es una broma, no hace falta que me maltrates-

Tn: -No te maltrate-

Horace: -Me empujaste el hombro-

Tn: -No es maltrato-

Horace: -Si lo e...-

Lo besé.

Horace: -No es maltrato-

Me reí.

Horace: -Me manipulas mujer-

Tn: -No te manipulo, solo no quiero discutir por una tontería-

Me miró como si estuviera loca.

Horace: -¡TU!, ¡Tn Sallow! ¡¿No quieres discutir?! ¡¿Quién eres y que hiciste con el amor de mi vida?!-

Tn: -respondiendo a la primer pregunta, no, no quiero discutir, y respondiendo a la segunda soy la misma Tn Sallow que conoces desde pequeños-

Horace: -Entonces... ¿te sientes bien?-

Tn: -me siento perfecta-

...

Millard: -¡chicos!-

Tn: -¿qué pasa Mills?-

Millard: -Lamento interrumpirlos, pero llegamos-

Habíamos llegado, todos estábamos bajando de los barcos felices, ya queluego de unas cuantas semanas al fin estábamos otra vez en el bucle de MissValeria, pero, la alegría no dura para siempre...

Los niños peculiares - Horace Somnusson y tu -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora