-Capítulo 8-

937 60 9
                                    

Narra Bronwyn

Me desperté después de una espantosa noche, y se preguntaran ¿por qué? Ni yo lo sé, pero me dolía todo el cuerpo, espalda, manos, piernas, brazos, cabeza, todo.

Como siempre cuando me levanto, despierto a las chicas.

Subí las escaleras, ya que yo estaba en la cama de abajo y Fiona y Claire en las de arriba.

Cuando las estaba por llamar las vi bien, y me di cuenta que ellas no eran mis amigas, eran chicas más grandes y diferentes ¿pero cómo?... Después me vi a mí en el espejo que estaba en la pared y grite del susto, ¿cambie de cuerpo? ¡¿Cómo?! Si me parezco a mí, por mi pelo rojizo ondulado y mis pecas pero ¡¿estoy más grande?! ¡¿Será que a Claire y Fiona también les paso eso?!

Fiona: -Que paso B...- ¿y tu quien eres? Ayer no te presentaste, soy Fiona-

Bronwyn: -F, soy yo, B, mírate al espejo-

Fiona: -¡¡Aaah!!-

Claire: -¡¿Que paso chicas?!-

Bronwyn y Fiona: -¡mírate al espejo!-

Claire: -¡¡Aaaah!!-

En ese instante entraron tres chicas, eran Tn por la cadenita que Horace le regaló, Emma por sus zapatos de plomo y Olive por sus guantes y pelo rojo.

Tn: -¡¡Ustedes también crecieron!!-

Y entraron seis chicos

Hugh: -¡¡¡Ustedes también crecieron!!!-

Enoch: -Busquemos a La Señorita Peregrine-

Todos-Enoch: -¡¡vamos!!-

Fuimos todos a la habitación de La Señorita Peregrine.

Tn toco desesperada como si su vida dependiera de ello.

La señorita Peregrine abrió la puerta y se sorprendió.

Srta. Peregrine: -¡niños! Entren-

Entramos todos y la miramos.

Srta. Peregrine: -Ayer no quise contarles, pero estamos a 1 de noviembre de 1944 por eso crecieron-

Tn: -Ay no se ustedes pero yo me veo bien linda-

Horace: -Concuerdo con mi dama-

Emma, Olive e Enoch: -Pues nosotros nos vemos bien, así que no tenemos queja-

Millard, Hugh y Los Gemelos: -Si claro, hablen por ustedes, nosotros estamos a la edad de la pubertad y nos quedaremos así por el resto de la eternidad-

Claire: -Pues todos excepto ustedes cuatro nos vemos increíbles-

Millard: -A claro, creció y eso de la penita para hablar hasta con nosotros se fue ¿no?-

Claire: -Si-

Fiona: -Lo único que tengo para decir... Es que ahora tengo que cuidar a Hugh-

Hugh: -¿Por qué? ¿Porque te pondrás celosa si alguna otra chica me mira?- Se rió medio burlándose y luego la abrazó.

Fiona: -Si, por eso, así que te estaré vigilando puberto-

Los niños peculiares - Horace Somnusson y tu -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora