-¡No me interesa quien eres, solo quiero que dejes a nuestros niños en paz!
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-¿Acuario?-
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-¿tengo un plan, sabes?... Primer paso, dialogar... si eso no funciona, iremos al paso dos... pelear- Me miró, al parecer esperanzado por su "magnífico" plan.
-Me gusta el paso dos- Le dije y rió.
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-¡Tn! ¡Tú muy bien sabes que nosotros no solemos decir groserías...! ¡Pero... Manda al carancho tus discursos y peleemos con ellos! ¡No van a escuchar!-
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Los niños peculiares - Horace Somnusson y tu -
HumorEsta es tu historia como una niña peculiar.