Lo dificil de la vida

Capitulo 5

Por fin había llegado el viernes en la noche, y como Law dijo, paso 7:00 en punto por mi para ir juntos a esa primaria.
Me sentia tan nerviosa, una vez más me reencontraria con esas personas que alguna vez fueron mis compañeros y que hacia tiempo que no hablaba con ellos. ¿Habran cambiado mucho fisicamente? Supongo que si, Law y yo lo hicimos, ¿seguiran recordandose entre si? Eso no lo se, pero al menos yo los recuerdo a todos. Todos mis nervios se fueron cuando vi a Law, iba con un traje negro muy elegante, yo iba con un vestido azul marino.

-Siempre puntual-
-La puntualidad es parte del caracter de una persona-
-Fufufu bien dicho-
-¿Estas lista Nico-ya?-
-Me siento muy nerviosa-
-Tranquila, todo estara bien... Te ves muy preciosa-
-Gracias, tu tambien te ves muy bien... Te queda perfecto ese traje-
-Gracias-

Law me abrio la puerta del carro y despues de que yo entrara el tambien lo hizo. En el camino ibamos muy tranquilos y en silencio, pero no era uno de esos silencios incomodos, más bien era uno muy agradable.

Por fin habíamos llegado a la escuela, salimos del carro y caminamos en dirección a ella, hasta el momento todo iba muy bien.
Una vez dentro nos encontramos con todos, y tal y como lo pense todos habían cambiado bastante, ahora todos eran personas maduras. Con las primeras chicas que hable fue con Vivi y Nami, se veian tan lindas.

-¡Robin!-
-Fufufu hola chicas-
-Hola Robin- saludo Vivi
-Hola Vivi-
-Wow Robin, no nos dijiste que tenias novio- decia Nami en su usual tono picaro
-No soy su novio, soy Law-
-¡¿Law?!- dijeron ambas muy sorprendidas
-Así es fufufu seguimos en contacto nosotros dos-
-Vaya, estan tan cambiados ambos-
-Al igual que ustedes-
-Jejeje si... Pero vamos a sentarnos, tenemos mucho de que hablar- dijo Nami
-Si, vamos- asintio Vivi
-Yo ire por una bebida, ¿quiéres algo Nico-ya?-
-Un poco de agua estaria bien, ¿quieres que te acompañe?-
-Esta bien si te quedas, ire rapido-
-De acuerdo-

Durante el tiempo en el que estuvimos hablando las tres me entere de varias cosas buenas que les habia sucedido a mis dos mejores amigas. Vivi actualmente se hacia cargo del negocio de su familia y ya estaba casada con un hombre del mismo lugar de origen que ella, su nombre era Kohza, dijo que él era muy amable y también algo obstinado cuando se trataba de defender lo que creia correcto, también menciono estar en espera de un bebe, me sentia muy feliz por ella. Por otra parte Nami menciono que empezo a salir con mi ex novio Sanji fufufu que curioso es el destino, pero aun así me alegro mucho por ambos y les deseo exito en su relación, también menciono que estaba estudiando en un grupo de arte, eso si que me sorprendio.

-¿Y qué hay de ti?-
-¿A qué te refieres?-
-Nami se refiere a qué es de tu vida actualmente-
-Exactamente-
-Bueno pues ahora soy arqueologa, y se podria decir que sigo a prueba en el trabajo en el que estoy ahora-
-Wow Robin, siempre supe que llegarias muy lejos-
-Si, es facinante lo que haz logrado... Y en tu vida amorosa ¿hay alguien del qué nos quieras hablar?-
-Fufufu pues no, desde la preparatoria no he querido salir con nadie-
-Vaya-
-¿Y qué hay de Torao-kun?-
-¿Qué pasa con él?-
-Nami, eso ya debe ser un poco más personal-
-Vamos, ambas queremos saber si en verdad andan o no-
-Pues no, solo somos amigos-
-¿Contenta Nami? Ya esta la respuesta-
-Pues yo no me la creo, ¿es qué acaso no haz notado como te mira? O hasta como lo puedes llegar a mirar tu-
-Pues la verdad nunca había prestado mucha atención en eso-
-Nami tiene algo de razón, ustedes dos se ven de una manera especial-
-Exacto, ustedes deberian estar juntos-
-Fufufu ire a buscarlo, ya se ha tardado-
-Bien-
-Suerte amiga-

Nami y Vivi si que eran muy observadoras o tal vez yo he estado tan distraida que jamas me había dado cuenta de las miradas que nos damos, ya no se que pasa, ¿tal vez deberia hablar con él? Haaaa no lo se.

-¿Nico Robin?-

Escuche que una voz me llamaba, y me hacia sentir algo de incomodidad, cuando me di la vuelta para ver quien era, la verdad no podia creerlo.

-¿Spandam?-
-Así es... Vaya que si estas muy cambiada-
-Pues tu igual Spandam-
-Te ves muy linda-

Y justo antes de que pudiera decir una palabra alguien nos interrumpio.

-¿Linda? Esta hermosa, muy deslumbrante-
-Zoro...-

Fue lo unico que pude decir, cuando lo vi me sentia en completo shook, es como volver al pasado. Me senti tan nerviosa que solo di la excusa de querer salir por un poco de aire fresco y me fui corriendo.
Queria estar sola y aclarar todo lo que había pasado hasta el momento, y cuando por fin lograba calmarme, un chico de cabello verde estaba a mi lado.

-Zoro... ¿Qué haces aquí?-
-Vine a tomar un poco de aire fresco ¿o es qué acaso solo tu puedes hacerlo?-
-No para nada... Yo ya tome el suficiente aire fresco, así que sera mejor que me vaya-

Nuevamente estaba dispuesta a huir de Zoro, pero solo logre avanzar dos pasos y una mano me detuvo, era él.

-Espera mujer-

Cuando su mano toco la mia, me sentia perdida, es como si todos esos sentimientos que alguna vez tuve por él y que quise guardar en lo más profundo de mi corazón, regresaran en ese mismo instante. Estaba tan nerviosa, pero aun así no lo demostre.

-¿Qué sucede?-
-Yo... Queria saber como estuviste todo este tiempo-
-¿En verdad para eso me detuviste?-
-Si bueno no, la verdad queria pedirte perdon-
-¿Perdon?-
-Si... Hace años cuando sali con Tashigi y tu me advertiste sobre lo malo que podria pasar no te escuche, preferi hacerte a un lado, no me detuve a pensar sobre tus sentimientos y se que te heri por eso, perdoname-
-La verdad nunca pense que el orgulloso Roronoa Zoro me pediria perdon, me siento un poco rara-
-¿Rara? Yo me siento algo avergonzado, fue ago dificil decir todo esto, pero me siento aliviado de por fin poder decirte eso-
-Pues gracias por decirlo-
-Por nada... Por cierto mujer-
-¿Qué sucede?-
-Por si tenias la duda, hablaba muy enserio cuando dije que eras hermosa-
-Fufufu gracias, tu también te ves genial-
-Robin...-
-¿Si?-

Podia sentir como Zoro se acercaba cada vez más a mi, poco a poco la distancia que había entre nosotros dos desaparecia y nuestras caras estaban a centimentros la una de la otra, es como si ya supieramos que iba a pasar.