Capitulo 7

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Una vez en el restaurante todo iba bien, desde que llegamos nos sentaron en una mesa junto a la ventana, era una mesa reservada por Zoro.

-Que vista tan bella-
-Sabia que te gustaria, por eso reserve esta mesa-
-Que buen gesto de tu parte-
-Bueno te mereces eso y más mujer-

No pude evitar sonrojarme con ese comentario de Zoro, era muy raro que el dijera algo así.
Despues de eso continuamos con la cena, ambos pedimos el mismo platillo, todo era silencio, hasta que Zoro fue el primero en hablar.

-Tu... ¿Quiéres bailar?-
-¿Sabes bailar?-
-Po por supuesto que se bailar... Me ofendes-
-Fufufu disculpa, es que recuerdo que no sabias-
-Bueno ya no somos niños, he aprendido muchas cosas-
-Puedo verlo-
-¿Entonces si?-
-Claro-

Ambos nos levantamos de nuestros asientos y comenzamos a bailar, era una canción lenta así que no había tanto problema en saber bailar o no, me sentia como en un cuento.

-¿Qué has hecho todo este tiempo mujer?-
-Continuar con mi vida normal, la vida que plane antes de que mis padres murieran-
-Ya veo-
-¿Qué tal tú? Es muy raro verte tan cambiado, eres todo un hombre y además esa cicatriz en el ojo es un misterio para mi-
-Esa cicatriz fue causada durante un enfrentamiento con mi maestro-
-¿Estudias?-
-Estudiaba, ahora soy maestro en un dojo no muy lejos de aquí-
-Mmm ya veo, pues felicidades-
-Gracias... Por cierto-
-¿Qué sucede?-
-¿En verdad no sales con Torao?-
-Fufufu ¿por qué tanta insistencia con eso?-
-Bueno la bruja me dijo que durante el reencuentro ustedes estuvieron muy juntos-
-Law solo es mi amigo... Él es el unico que nunca se ha apartado de mi-
-Robin-
-Si espadachin-san-

Zoro solo me vio a los ojos y momentos despues pude sentir como nuestros labios se unian lentamente, es como si fuermos un iman y una moneda que se atraian entre si, fue un beso lento al igual que la canción. Poco a poco nos separamos uno del otro.

-Perdoname Robin, no debi hacer eso-
-Zoro ya no somos niños, ambos sabemos lo que pasa-
-Si, tienes toda la razón-
-Y ya es hora de hablar con la verdad-
-Si... Robin me gustas, y no de una manera fisica o algo así, lo que siento por ti es muy real y no quisiera dejarte esta noche en tu casa y que mañana seamos otra vez ex compañeros de primaria-
-Zoro-
-Se que tal vez no merezca esto pero por favor dame una oportunidad de quedarme a tu lado, de compensarte por todos esos años que te deje sola-

Sentia que las emociones se me subian al rostro y no pude evitar llorar con cada palabra que decia Zoro.

-No llores Robin, lamento lo que dije pero por favor no llores-
-Por favor no lo lamentes, si quiero estar contigo, por mucho que trate de guardar estos sentimientos ya no puedo más, aun te quiero Zoro-

Un beso y un abrazo fue lo que acompaño a nuestra nueva decisión, lo que había comenzado como una cena cualquiera, ahora se convertia en un día especial que recordaria por toda mi vida.

Apartir de esa noche mi vida cambio por completo, despues de esa maravillosa cena, Zoro me llevo a mi casa y a la mañana siguiente Zoro estaba en mi puerta con unas flores, todos los días era lo mismo, siempre traia unas flores preciosas o cualquier otro regalo. Despues de que ambos saliamos de nuestros trabajos ibamos a caminar, cenar, pasear, al cine o a cualquier otra parte que se nos ocurriera, estuvimos así durante medio año de relación.
Nos sentiamos bien ambos, pero aun así ya era momento de dar el segundo paso en nuestra relación, me referia a la intimidad. Eramos totalmente ajenos a ese tema, nunca habíamos avanzado a nada más que leves caricias, y por mi parte ya me sentia preparada para estar con él, queria que él fuera mi primera vez, pues lo amaba tanto que no le negaria nada.

-Oe mujer-
-¿Qué sucede Zoro?-
-Tiene rato que te estoy hablando, ¿pasa algo?-
-No, no pasa nada-
-¿Segura?-
-Si-
Zoro apago la televisión y se volteo a verme a los ojos.
-Te conozco preciosa, dime que te pasa-
-Yo... Quiero hacer más-
-¿Hacer más? Hablas de tu trabajo-
-No, me refiero a nosotros... Quiero ir más lejos-
-Robin yo-
-Pero no te preocupes Zoro, si tu no estas de acuerdo yo entiendo-
-No es eso mujer... Yo siempre he estado preparado para ti pero, temo que tu no lo estes-
-Yo estoy bien Zoro, si es contigo estoy perfectamente bien-
-De acuerdo-
-Zor...-

(Advertencia, lemon)

No pude terminar de decir ni una sola palabra cuando senti los hambrientos labios de Zoro sobre los mios, era una sensación muy intensa, algo que no había sentido jamas. Era como una adicción y queria más de eso, no se en que momento me sente sobre él pero era una sensación más comoda para ambos.
Zoro puso sus manos en mi espalda y la empezo a acariciar suavemente, pero no las movia más abajo, sentia como una tortura cada vez que repetia sus toques. Con una de mis manos tome las de él y las baje hacia mi trasero, tal vez era algo muy atrevido pero estaba deseosa porque me tocara, queria más de él. Y así fue, una vez que Zoro tuvo mi permiso para tocarme, él bajo sus manos a mi trasero y lo empezo a apretar y masajear, se sentia tan bien que solo podia gemir por el placer que sentia.
Pero yo no queria ser la unica que disfrutara del momento, así que le quite la playera a Zoro y empece a darle muchos besos, desde su cuello hasta su abdomen. Queria que solo fuera mio y que todos lo supieran así que lo empece a morder, para mi sorpresa el dio un leve gemido.

-Sabes delicioso fufufu-
-Puedes comerme todo lo que quieras mujer-
-Espero que esas palabras no se te olviden Roronoa Zoro-
-Tampoco es como que tu lo vayas a tener muy facil mujer-
-Eso veremos-

Zoro dejo de jugar con mi trasero para agarrar directamente mi blusa de botones y romperla.

-Adoraba esa blusa-
-Lo siento mujer, es que odio esos botones que nos separan-
-No importa, sigamos-

Estaba agradecida de que estuvieramos en mi casa, sino me hubiera ido sin ropa. Despues de eso Zoro me volvio a besar con aun más pasion de la que ya había, yo puse mis manos en su cabello y él empezo a masajear mis pechos, primero iba muy despacio pero luego me los empezo a apretar muy fuerta y pellizcar, también los lamia y besaba.

-Ahhh Zoro-
-Eso mujer, di mi nombre más alto-
-Te quiero Zoro-
-Yo también te quiero mujer-

En medio de nuestro siguiente beso decidi desabrochar los pantalones de Zoro y empezar a acariciar su dura erección, se sentia un poco humedo, yo también ya me estaba mojando bastante, tanto que sentia que todo mi cuerpo palpitaba.
Antes de que pudiera tocar más del cuerpo de Zoro él mismo me detuvo.

-Mujer-
-Ahh qué sucede-
-Ya no hay marcha atras despues de esto, ¿en verdad estas segura de qué esto es lo que quieres?-
-Si-

Para demostrar la seguridad de mi respuesta decidi bajar completamente sus pantalones junto con sus boxers y acariciar directamente la dura masculinidad de mi novio, era tan grande que no sabia si cabria en mi, pero aun así no me iba a dar por vencida. Yo misma lo tome y lo introduci lentamente en mi, estaba tan mojada que no habia necesidad de aflojarme.
Desde ese momento nuestros cuerpos y corazones se hicieron uno mismo, me sentia tan bien y a la vez tan feliz, duramos toda la noche haciendo lo mismo, era muy exitante.



Continuara...

Casi no escribo lemon así que lamento si les di algo mediocre :/ pero aun así espero que les haya gustado el capitulo :)

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