Un Deseo o Un Milagro?

4

Pasaron los días y yo no quería salir ni de mi habitación, a veces mis gallinas venían hasta mi habitación porque me echaban de menos, obviamente sabía que era mi madre intentando animarme.

Un dia me llené de valor y fui donde siempre solíamos encontrarnos para irnos a explorar, pero no estaba, pensé que se habría enfadado así que para disculparme por lo que hice, se me ocurrió la idea de ir a su casa, no creía que sería muy difícil porque al fin y al cabo sabía que estaba al otro lado del bosque.

Fui a mi casa y me puse ropa cómoda con dos trenzas, cogí una mochila con comida y agua porque como soy tan paranoica yo ya me imaginaba que me iba a perder para siempre ya que nunca lo había cruzado del todo.

Me monte en mi caballo Lexi y fui hacia el oeste, mientras cruzaba el bosque, me fijé en que empezaría a llover, era un cielo demasiado gris, mi madre me dijo que cuando el cielo estaba tan gris es porque algo malo iba a pasar.

Empezaban a caer un par de gotas pero yo no iba a volver a casa, no sin antes disculparme por haberlo abandonado así porque sí.

Después de unos largos 40 minutos, por fin conseguí ver casas. Dejé a mi caballo al lado de un árbol y me puse a preguntar casa por casa.

-Disculpe, ¿conoce a algún Tom?

-No lo siento.

-Hola buenas tardes, ¿sabe si por aquí vive algún Tom? De unos 16 años.

-No disculpa, pero me extraña que busques a alguien con esa información, espera aquí.

Me quedé esperando en la puerta tal como me dijo el señor, segundos después volvió con un papel donde se venía un cartel de una persona desconocida, efectivamente, el de la foto, era Tom, el realmente estaba perdido, pero lo peor es que lo estaba desde 1998.

-Pero señor seguro que esto es real? Eso es de hace más de veinte años y yo lo vi hace poco igual que la foto...

-Disculpa?

Le cogí el papel de las manos y con mi caballo fui donde lo vi por última vez, la cueva.