𝓓𝓮𝓪𝓽𝓱 𝓲𝓷 𝓱𝓲𝓼 𝓔𝔂𝓮𝓼

Volviste

— Repite lo que dijiste, ella es ¿Qué? - Volvió a burlarse.

— Ahora que lo pienso, actúe sin pensarlo y dije eso sin... pensarlo, solo lo dije, y nunca había dicho algo así de una mujer. - Ella es mía...

— Mejor ve a descansar Lee, y relaja esos pensamientos. - Se burló sarcásticamente, dándole una palmada en el hombro para después irse.

— ¡Joven!, su acompañada entró a la habitación de Min Ho. - Dijo un sirviente entrando a la habitación, bastante preocupado.

— ¿Enserio? Mmm... Tarde o temprano tenía que saber y ver cosas de éste tipo. - Dije entre preocupado y aliviado, no estaría perdiendo el tiempo en ocultarle éste tipo de cosas. - Por favor, asegúrese de que mañana vaya a la escuela.

—Lo que ordene joven. - El sirviente hizo una reverencia y se marchó.

— Bien, es hora de dormir. - Fuí directo a mi aposento, pero sentía que algo andaba mal, ignore aquel pensamiento y solo me recosté para dormir.

★ Al día siguiente ★

Mmm ésta cama es tan cómoda, y... Ésta loción de hombre es tan... Rica, espera ¿¡De hombre!?... Aaaah Lee. Me desperté dando un grito de espanto y mire a todos lados, pero es obvio que él no se encontraba en la misma cama, pero su loción es tan fuerte; tomé con una mano su pijama cerca del pecho.

Mi vida nunca fue tan interesante, y si no fuera por él... Ayer... Mi madre me habría m... - fuiste interrumpida.

La puerta se abrió y entraron dos señoritas. - Buendía señorita. - Hicieron una reverencia.

— Oh... Buenos días. - Dije un poco confundida.

— Le trajimos ésta ropa, el joven amo nos ordenó ésto y que no podemos irnos hasta que elija lo que más le guste. - En cuanto dijo eso entraron otras dos señoritas con un perchero grande lleno de ropa.

— Después de revisar entre toda esa ropa, no sabía si Lee logró conocer mis gustos con solo verme una vez o eligió la ropa a su gusto...

— Bien ya elegí la ropa señoritas, muchas gracias por su amabilidad. - Hice una reverencia y sonreí delicadamente.

— Gracias a usted, ahora la dejamos sola, si necesita ayuda no dude en llamarnos. - Contestó una de ellas, hicieron una reverencia y se retiraron en fila.

Antes de ponerme lo que elegí decidí tomarme un baño, aún estando en la ducha, me pregunté si estar aquí era lo correcto, todo era como una novela; de esas que me gustan leer, pero... Está pasando en verdad, no sé cuáles son las consecuencias de ésto, y si ¿Desde un principio Lee me hubiera matado? Realmente tendré una vida diferente después de ésta decisión tan estúpida que tome... ¿La habrá?
Salí de bañarme y me cambié, tenía que ir a la escuela, pero no quería volver a toparme con Momo y sus amigas, y sobre todo con el profesor Kim, por mi culpa casi pierde su carrera, pero lo tenía bien merecido.