wish at night ; Kim Doyoung ≈

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— Ven, ven. En cuenta de tres, nos sacamos las toallas, ¿Va?

— Va.— reí nerviosa. Seojin y yo nos pusimos frente a frente. Ambas estábamos nerviosas y lo notabamos.

— 1...

— 2...

— 3...

Ambas nos quitamos las toallas y vimos el color de nuestros cabellos. Me cubrí la boca el ver su cabello de color negro. Siempre solía usar colores suaves como un rosa, rubio, etc. Reí nerviosa.

Toque mi cabello y me di cuenta que era rojo, un rojo súper intenso. Quedé en shock.

— ¿Que? ¿No te gusta el color? — pregunto nerviosa. Negué.

— No es eso, solo que... Jamás me había pintado de este color. Siempre quise este color pero mi mamá nunca quiso — reí. Ella sonrió feliz.

Contexto: Seojin es la pareja de Taeil, desde que fuimos el colegio juntos y hasta ahora se conocen y llevan 7 años de relación.

La relación más sana que ví.
Y mi favorita.

— Déjame decirte que, este color, te va a la perfección. Por eso lo elegí.— habló sonriente. Reí.

Seojin es estilista y sabe mucho en el mundo de la moda.

Ella es una de las pocas mujeres que conozco y puedo decirle "amiga" porque lo es para mí.

Miré mi cabello y sonreí felíz.

— Por cierto, tengo algo para vos — sonrió mirándome. Tomé asiento en el sofá y procedí a secar un poco mi cabello con la toalla. Se acercó el perchero que estaba en la entrada y saco algo de su bolsillo.

— ¿Que es? — dejé a un lado lo que estaba haciendo y la miré atenta. Sacó su mano detrás y me mostró una prueba de embarazo. Sonreí inconscientemente.

Positivo.

Cubrí mi boca feliz y asombrada. La abracé fuertemente sin lastimarla.

— ¡Felicidades!... ¿De cuantos meses estás? — le devolví la prueba.

— De tres meses — habló sonriente. Abrí mis ojos grandes.

— ¿Que? Pero, no se nota nada, por dios...¿Quien más lo sabe?

— Nadie, nadie más lo sabe. ¡Eres la primera! — agarró mis manos. Levanté mis cejas y toque mi cabello.

— ¿Cuándo se lo dirás a Taeil? — hablé con entusiasmo.

— bueno, como hoy a partir de las 12:00, cumplimos ocho años estando en pareja, pensaba en decírselo, y necesito que reunas a todos los chicos, que no falte ni uno — sonrió feliz. Reí mirándola. Se veía tan felíz.

— cuenta con eso — sonreí. Me abrazó fuertemente.

— Eres con la única que puedo contar, y realmente te agarre muchísimo cariño — sonrió.— por cierto, también Jazmín.— asintió. Ladee la cabeza y la miré confundida.

— ¿Jazmín? ¿Quién es? — reí sin entender nada. Ella se rascó la nuca y negó.— Dime, quién es.

— La novia de Doyoung.— finalizó la frase nerviosa. Borré mi sonrisa rápidamente.— ¡Perdón! Yo metiendo la pata siempre — río nerviosa al ver mi cara. Negué riendo.

— No te preocupes Seojin. Está bien, ¿Quieres que ella vaya? — hablé sin darle importancia. Ella bajo sus hombros. La miré "sin entender". Me dolía tanto el "Novia de Doyoung".

— Si te incómoda o te hace sentir mal, puedo no ir, y está bien.— habló acariciando mis hombros. Me alejé mirándola seria.— Yoosung, tampoco es para que te pongas así...

— No, lo siento, perdón. No fue mi intención...— reí mirándola.— está bien que vaya, de tal forma, es tu amiga y solo voy por vos y Taeil.— sonreí. Ella asintió mirándome.

— Bueno... ¿Vamos a secarse el pelo? Y te peinare para la noche, ¿Quieres? — sonrió. Asentí mirándola.

— Mientras, haré una reserva en un restaurante muy bueno — hablé mirándola. Ella asintió y se marchó a la habitación.

Me pegué en la frente sintiéndome una estúpida. La había hecho sentir tan mal. Suspiré y agarré mi celular para reservar.

El aviso estaba para todos, y cada quien llevaría a quien quisiera, pero no se podía pasar de 25 perdonas. Lo bueno, todos irían y nadie faltaría.

No decidí ponerme algo para "exagerar", solo usaría una falda de tela vaquera clara con botones delante y una camisa tejida de color blanco y algunos detalles rojos y mis zapatillas blancas.

( https://pin.it/5wi4pct )

Seojin me hizo rulos en el las puntas del cabello. Y me lo recogió en una coleta dejando dos mechones delante dándole "decoración" a mi rostro, también me hizo una maquillaje totalmente natural.

Me miré en el espejo por último y me puse crema en los brazos y piernas, para luego recordar que ya me había puesto antes.

El olor de la crema era suave y duradero.

Salí primero porque debía de llegar antes y ver el lugar. Había reservado en un segundo piso y al aire libre.