Deseo [Sanemi x Lectora]

26

Sanemi: Demonios tengo que llegar a Muzan lo más rápido posible

Sanemi se detuvo al encontrarse con la Luna superior número uno

Empezó a recordar las palabras de Sen y vio que sus descripciones hacia aquel demonio eran idénticas

— Así que tu eres el que atormenta a mi esposa en sus sueños, eso es algo imperdonable— Habló Sanemi

La noche se hacia larga parecía ser eterno, pero todo tiene un fin y una consecuencia

Al final de la pelea no todo fue felicidad, como decía todo tiene una consecuencia

Genya estaba muriendo mientras que su cuerpo se hacía cenizas y se lo llevaba el viento

— Hermano, tienes que vivir porque, Sen esta embarazada y tienes una familia que cuidar ahora— Habló Genya

Sanemi empezó a llorar mientras escuchaba las palabras de su hermano Genya estaba pasando un momento deprimente, estaba perdiendo a su único familiar que tenía

Mientras tanto Sen estaba reaccionando mejor y escuchando las palabras de Aoi

— Sen, te pediré algo cruel, pero tienes que hacerlo, toma estas inyecciones, elige una habitación y tienes que dormir a los cazadores que entren a la habitación— Habló Aoi

Sen tuvo miedo al escuchar las palabras de Aoi pero solo asintió con la cabeza y entró al Salón dónde había una tela en medio del Salón tapando la mitad del Salón

— Aquí esta bien— Habló Sen

— Te ayudaré, solo dime que tengo que hacer

— Si, el resto de kakushis traerán cazadores que no tengan oportunidad de salvarse y tendremos que dormirlos, en esta mitad de la sala pondremos a los fallecidos— Explicó Sen

El kakushi asintió con la cabeza y empezó a ordenar con sabanas el suelo dónde puedan dejar a los cazadores

No paso mucho y empezaron a venir los kakushis con cazadores gravemente heridos

—¡Sen aquí te trago unos frascos para que puedas recargar!— Habló Kiyo

— ¡Esta bien!— Respondió Sen

Kiyo dejó una caja a lado de la entrada y se retiró corriendo mientras que los kakushis seguían llegando con los heridos gravemente

Algunos ya llegaban muertos y otros agonizando literalmente algunos venían con heridas que eran imposibles de curar y que eran mortales

Sen estaba muy ocupada que le faltaban manos pues llegaba uno y otro y no podía atender a todos al mismo tiempo

Pero no se detuvo, como si sus plegarias fueran escuchadas Demi llegó para ayudar a Sen y al kakushi

Juntos, durmieron a las personas para que dejaran de sufrir mientras que los llevaban al otro lado tapando sus rostros con una sabana blanca

Ya estaba amaneciendo, Sen y Demi terminaban de dormir a todos los cazadores

Con algo de cansancio se sentó a lado de Demi a descansar un poco, pues dentro de unos cuantos minutos llegarían más cazadores heridos