Whatever Happens •Juliantina•

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7#: "Cerrar ciclos"

VALENTINA

Que el tiempo borra las heridas era una frase casi 100% cierta, en los últimos días me estaba sintiendo un poco mejor y ya no rechazaba cualquier cosa que se me ofreciera, al fin y al cabo nadie tenia la culpa de como yo me sentía.. Juliana me convenció que no tenia que dejarme vencer y que si quería demostrar mi verdad tenia que estar de pie y dispuesta a lo que venia. Ahora hacia poco mas de tres semanas que no la veía pero cada tanto Erik me decía que Juliana le había preguntado por mi. Puede que esa simple frase lograra dibujar una muy mínima sonrisa en mi cara.

No voy a negar que mis sentimientos para con ella estaban evolucionado, ya no sentía ese desprecio y esas ganas de atacarla cada vez que me hablaba o que la veía. Para mi mala suerte extrañaba  verla tan seguido y aunque intentaba no hacerme la cabeza me costaba variós minutos sin dormir. No quería volver a pensar en ella de esa forma y Mad era de gran ayuda, de vez en cuando con ayuda de algún guardia lograba poder estar en contacto...

—¿Entonces no puedes venir?— Me lamente, ya comenzaba a extrañarla.

—Me encantaría pero estamos en pleno rodaje y sabes que no puedo romper mi contrato— Mad igual se escuchaba desanimada— No te imaginas cuanto te extraño, es raro ¿no?— Se rio— Tu me haces sentir rara.

—Raro ¿por que?— Me reí sola, estaba sentada sobre mi cama.— Espero que no sea de mala forma.

—No me hagas esto— Suplicó y se quedó en silencio.— Sabes que contigo no podría ser nada malo.— Aunque estaba sola su comentario hizo que me ruborizara un poco.

—No te estoy haciendo nada— Insistí— ¿Qué te hago?— Me gustaba jugar con ella de forma, siempre hacíamos lo mismo.

—Se que no es la forma pero...— Se detuvo y escuche como su respiración se entrecortaba un poco.— Me gustas Valentina...de verdad me gustas mucho y en este último tiempo siento que te extraño mas de lo normal.— Lo decía de una forma triste como si no le gustara sentirse así.

—¿Y eso que quiere decir?— Me pasaba algo muy parecido pero yo si podía darle nombre.— Parece que no te gustara sentirse así.

—Que me importas— Soltó una risita— Siento que te quiero...— Silencio otra vez, comencé a ponerme nerviosa— Y no, no me gusta sentir así— Confesó de una vez por todas.— Ya la pase mal una vez y estar con vos siendo esto me hace sentir vulnerable.— Me la quería comer a besos, escucharla así me causaba un ternura inmensa.

—Eso era...— Ahora me reí yo— ¿Tan difícil era de decir? pensé que era algo peor.— Mad no dijo nada— ¿Tan difícil es querer a una persona?

—Para mi si— Contestó— Nunca sentí algo parecido— Hizo una pausa— No quiero quedarme a tu merced.

Yo no podía decir lo mismo.

—No te voy a negar que pienso en ti de otra forma, pero tranquila que no soy el demonio que se va a robar tu alma— Mad realmente me gustaba y sentía que podríamos intentar algo— Creo que deberíamos dejar esta charla para cuando volvamos a vernos ¿no crees? es importante aclarar las cosas.

—Opino igual.

La puerta se abrió repentinamente y pude ver que quien venia era Juliana, después de varios días volvía a verla. Su figura delante de mis ojos me dejo un poco pasmada, mirándola como idiota.

—Me tengo que ir— Me despedí— Nos vemos pronto, te quiero.— Finalice sin sacar mis ojos de la jefa del departamento.

—Adiós hermosa.