Capitulo 7

2.5K 335 19
                                    


Mew me pregunto si podía quedarse a pasar la noche en mi departamento, así que se lo permití, pero no por que quisiera verlo o pasar una noche salvaje con él, aunque el pensamiento cruzo por mi mente, sino porque esa noche no había utilizado su coche y le había pedido a Ae que lo trajera a mi departamento y porque ya era muy tarde para que se regresara al suyo a pie.

No puedo hacerlo, no en este momento, ósea, ni siquiera pude besarlo, ¿Cómo es posible que piense en tener sexo con él? ¡NO! ¡No quiero ni imaginármelo! ¡Mejor contrólate!

Mew se encontraba en el baño, le había preparado una pantalonera y una camiseta que me quedaban grandes para que durmiera a gusto, los coloque sobre mi cama. Otra vez volvieron a asaltarme los pensamientos sucios mientras lo imagine ahí en la regadera, lentamente me acerque a la puerta mordiendo mi labio inferior, aun me costaba creer que estuviera haciendo esto.

¡Mírate, Gulf! ¿Qué estás haciendo, estúpido? ¡Te estas avergonzando tú mismo! ¡NO LO HAGAS!

No me había dado cuenta de que estaba conteniendo mi aliento hasta que lo solté. Sí, yo no podía rebajarme a espiarlo. Por lo menos, no en este momento. O quizá nunca lo haría. Agache mi cabeza y me aleje rápidamente del cuarto de baño.

Decidí entretenerme preparando te de limón para los dos, una vez listo los serví en dos tazas que coloqué en la mesa de centro de la sala antes de encender la televisión, aquello me había servido para olvidarme de mi visitante, hasta que Mew salió de mi habitación y se aproximó a mí.

- ¿Estás bien que haya colocado mi ropa sucia en tu canasto? – me pregunto mientras se retiraba unas gotas de agua que aún seguían cayendo de su cabello y observando la alomada y mantas que deje en el sillón para él.

- Está bien – le dije tomando una de las tazas para entregársela – Mañana mandare a lavar la ropa...

- Gracias – dijo sentándose frente a mi haciendo que mi corazón comenzara a palpitar por miedo a que volviera a hacer alguno de sus movimientos conmigo.

Agarre mi bebida y sujete la taza con ambas manos acercándola a mis labios, el hizo lo mismo con la suya, dio un sorbo y después la deposito sobre la mesa, después hizo que me tensara cuando se acercó a mi.

¿Por qué tenía que sentarse frente a mí? ¡MUEVETE!

Mew no dijo nada ni hizo nada, solo descanso su cabeza sobre su brazo derecho que había puesto al final del sillón mirándome atentamente. Los latidos de mi corazón comenzaron a emporar. Hice acopio de todo mi autocontrol para no mirarlo, tratando de tener mis ojos clavados en la pantalla de la televisión.

¡Te lo advierto, no trates de hacer nada!

- Estoy tan casando... - dijo aun mirándome

- Entonces duérmete – le respondí sin mirarlo – Ahí dejé una almohada y mantas...

- ¿Cómo puedo dormirme si la televisión aun esta prendida? – pregunto entre carcajadas

¡Cierto!

- Lo siento – dije estirando mi brazo para alcanzar el control remoto – Me iré a mi habitación – de pronto Mew sujeto mi mano acercándose aún más a mí.

- ¿Podrías dormir conmigo? – dijo con una sonrisa y yo trate de liberarme de su agarre

¡Maldición! ¿Estas tratando de matarme?

- Preferiría dormir en mi habitación – le dije mirándolo con el ceño fruncido

- Entonces durmamos en tu habitación – me acerco a él de un jalón – Vamos

¡Hey, soy tu futuro esposo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora