Capitulo 16

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Narra Jace

Me removí incómodo ante mi posición, podía sentir el frío de las sabanas debajo de mí, abrí los ojos poco a poco acostumbrándome a la iluminación del cuarto blanco donde me encontraba y observe a mi alrededor con más detenimiento intentando recordar como llegue aquí en primer lugar.

No tarde en quejarme al reconocer el singular olor de los hospitales.

- ¡Está vivo! - Mason salto encima de mi babeando toda mi cara depositando besos en ella.

- ¡Ay no! - grité alejándolo de mí rápidamente y limpie mi rostro lo más fuerte que pude.

- ¿No necesita estar en observación o una operación? - preguntó Clarie a lo que supuse era una enfermera la cual rió y negó con la cabeza antes de hablar.

- Sólo fue un desmayo, tampoco es que necesité una camilla o se quede toda la noche - que bueno que tenga una novia que se preocupe tanto por el...

- ¿Perdón? - Clarie quedó congelada en su lugar procesando aún las palabras de la señorita, por mi parte ignore esa escena y observe a mis mejores amigos que me dedicaban miradas de alivio.

- Amigo, tu mamá ya viene para acá - hablo Newt sentándose a mi lado.

- Claire conocerá a su suegra - mencionó la pelirosa con un tono burlón y con claras intenciones de molestar, sin embargo, no era tonta y bajó la voz para que Clarie ni yo la escucharamos, Alex y Lyra quienes estaban con ella empezaron a reír cómplices de su bromita.

- Te escuché - le dije con una sonrisa retadora, tal vez así dejen de cuchichear, Emma me volteo a ver y me saco la lengua orgullosa de su comentario.

- Miren chicos, la comida de los hospitales no está tan mal - se adentraron a la habitación Thomas y Kyle cada quien con una bandeja llena de alimentos de dudosa procedencia.

- ¿De dónde sacaron eso? - habló la enfermera exaltada.

- Visitamos a los pacientes y había un par que no querían comer, les pedimos amablemente su comida y aquí estamos - dijo Kyle tranquilamente

- ¡Ustedes vendrán conmigo! - la enfermera agarró de las orejas a los dos y se los llevó al pasillo, desde lejos se escuchaba el regaño que le pegaba a los dos.

- ¿Dónde está mi hijo? - mi madre apareció por la puerta recorriendo la habitación con la mirada hasta caer en mi - ¡Oh mi niño! - corrió y me abrazó , le correspondí de inmediato - Me dijeron que habías salido volando de un coche y pensé en lo peor, ¿Te duele algo? ¿No te rompiste nada?

- ¿Quién te dijo eso? - pregunté confundido y repase mi ultimo recuerdo, simplemente sali del juego endemoniado y terriblemente peligroso apenas sobreviviendo y se volvió todo oscuro, mas no recordaba ningún coche.

Newt comenzó a silbar y de inmediato supe quién fue el culpable de preocupar asi a mi madre.

- ¡Newt eso no se hace! - le gritó Emma acercándose para darle un zape

- Te explicaré todo cuando salgamos de aquí, pero estoy bien - le dije para tranquilizarla

- Claire y yo nos vamos - mencionó Lyra empujando a la mencionada.

- Pero yo quiero estar aquí - hablo Claire poniendo resistencia.

- Creo que hay dulces en la cafetería...

- ¡Sí comida! - casi salió corriendo, ambas se fueron.

Un rato después llegó otra vez la enfermera y comenzó a hablar con mi mamá mientras que los demás chicos que aún quedaban en la habitación estaban jugando al gato en una libreta.

- ¡Te gané! - habló Emma burlándose de mi amigo y comenzó a bailar, Alex sacó de su bolso billetes de monopolio y comenzó a aventarlos alrededor de nuestra amiga.

No preguntaré porque los tenía guardados en primer lugar.

- ¡Eso no es justo! Algo está mal en esta libreta - se quejó Newt revisando la hoja donde jugaron hace unos segundos.

- ¡Hola chicos! - hablo Claire entrando a la habitación - No adivinaran lo que hicimos - sus brazos estaban llenos de pastelitos, dulces y algunas papitas, detrás de ella estaba Lyra igual de cargada de chucherías.

- Si fue robar la cafetería creo que es algo muy notable - mencionó Mason y Alex le dio un zape - ¿Y eso por que? 

- A veces eres insoportable - se encogió de hombros e ignoró sus quejas.

- Creo que merezco uno por ganarle a todos aquí y ser la mejor en el gato - dijo Emma y le quitó un chocolate.

- Yo me merezco uno solo por ser linda - Alex hizo la misma acción, pero con un pastelito.

De pronto todos, incluyendome, le quitamos un dulce, adueñándonos de las pistas del crimen que probablemente cometieron.

- No te preocupes Claire, son como esa niña que nos encontramos hace rato - dijo Lyra reconfortando a la chica que estaba haciendo pucheros en una esquina de la habitación.

- Disculpe señorita ¿Cuál niña? - preguntó la enfermera captando la atención de todos.

- Una que vimos en uno de los pasillos, vestía con un vestido blanco y tenía dos coletas altas, pero pobrecita, parecía necesitar una golosina urgentemente, se veía muy pálida... - describía Lyra con una sonrisa y orgullosa por su buena acción.

- Los niños están prohibidos en este hospital por lo que pasó aquella vez... - su mirada quedó fija en uno de los muros durante varios segundos y después nos miró - Es imposible que haya un niño por ahí y menos solo

- Pero la vimos parada, parecía desorientada... - siguió narrando Lyra confusa - Aunque vi que tenía una marca en una de sus mejillas...

El rostro de la enfermera quedó pálido inmediatamente.

- Chicas... eso que vieron no fue una niña - habló despacio con cierto temor de alterarnos - Fue un fantasma... - todos quedamos de piedra al escucharla, más Clarie y Lyra que tragaron en seco, ahora las pálidas eran ellas.

- Ósea que... - dijo Claire - ¿Que le di unas papitas a un fantasma? ¿Esto puede ser peor? ¡Ni siquiera se las puede comer! 

- ¡Quiero verla! - gritó Emma dando saltitos de emoción.

- Quiero irme de aquí... - mencionó Lyra mirando a la nada.

- Quiero unos tacos - dije de repente y recibí una reprimenda de mi madre.

- Quiero saber a dónde fueron los dos torpes que faltan - hablo Mason y como si los hubieran invocado aparecieron por la puerta con una sonrisa.

- La buena noticia es que nos dejaron terminar las bandejas de comida... - mencionó Thomas

- La mala es que debemos venir mañana para ayudar a darle de comer a los enfermos y sin poder probar del delicioso manjar - lloriqueo Kyle

- Sólo verlos masticar y sin poder quitarles un poco es una tortura - Thomas le siguió el juego y ambos comenzaron a lamentarse mientras se abrazaban.

- No me pueden avergonzar más - dije sabiendo que mi madre estaba presente y que la enfermera pensaría que mi vida estaba rodeada de locos a pesar de que es la verdad.

La noche concluyó saliendo del hospital ya muy tarde, caminamos juntos hasta llegar a nuestros hogares, mientras me recostaba en mi cama cansado, en el fondo agradecía que se preocuparán por mi bienestar y entre bromas, hicieron que la situación no fuera un mal recuerdo.

Se que nunca me aburriré si ellos están conmigo.

Una Amistad Sin Límites [BSL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora