Capítulo 5

33 4 0
                                    

POV Gabriela

★★★1747★★★

Es divertido enseñarle algo a alguien. Emocionante cuando es a escondidas. Poco a poco convencí a Luis (con ayuda de Alma y Mateo) para que aprendiera español y lo está haciendo muy bien. Además, eso está haciendo que yo aprenda otomí.

Gabriela: ¡Muy bien! -sonreí- Has aprendido muy rápido.

Luis: Tú también -rió-. No puedo creer que hayas querido aprender otomí.

Gabriela: Es muy bonito, me gusta mucho. Mi familia me había pedido que aprendiera italiano o francés.

Luis: ¿Italiano?

Asentí.

Gabriela: Ser hija de Carlos Torres es muy cansado.

Luis: Pero creía que...

Gabriela: ¿Por ser mujer no me deja aprender cosas?

Asintió apenado. Él también piensa que es muy injusto.

Gabriela: Sí, pero antes pretendía casarme con alguien de otro país. Así fue hasta que Antonio se ofreció a ser mi prometido -sonreí de labios cerrados-. Solamente acepté porque lo prefería a él que a un egocéntrico.

Luis: ¿No lo... quieres?

Gabriela: Sí, pero como amigo -suspiré-. Es como mi hermano, pero uno bueno y no como Carlos que me trata como quiere.

Luis: Ya veo...

La puerta se abrió de golpe alarmando nos. Natalia entró con la respiración entrecortada y nos miró.

Natalia: Luis tiene que salir de aquí.

Luis: ¿Qué pasa?

Natalia: La señora viene -se acercó a nosotros-. Las demás están deteniéndola.

Gabriela: Mi mamá... -miré a otros lados- Iré a ayudarlas. Natalia sácalo.

Salí rápidamente sin esperar respuesta de Luis. Llegué hasta donde estaban las cuatro y mi mamá me miró molesta.

Rosa: ¡Al fin llegas! Tienes que reprender a estas muchachas, se toman muchas libertades.

Las miré.

Gabriela: No te preocupes, lo haré, madre.

Rosa: Si no puedes tendré que hacerlo yo.

Negué rápidamente.

Gabriela: Yo puedo encargarme de mis sirvientas -las miré-. A mi habitación ahora mismo -demandé.

Mis amigas solamente asintieron y se fueron. Han aprendido gracias a Sonia cómo actuar frente a mi madre. Así ella no sospecha nada.

Rosa: Me dijeron que vieron a uno de los muchachos entrar a tu habitación.

Gabriela: ¡Oh sí! Necesitaba que me ayudara con algo y solo eso. Salió en pocos minutos.

My immortal #D3.5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora