Capítulo 47: Toph vs Azula...

6.1K 761 422
                                    

¡Feliz día del amigo!

Bueno, depende que país sean.

La verdad pensaba publicar el capítulo el viernes como siempre, pero bueno, el esfuerzo lo vale y mejor lo hago ahora, como un regalo para ustedes bola de pendejos, digo, mis amigos.

Así que recuerden, sin importar que tan solos se sientan, siempre podrán con su amigo, camarada, compa, hermano, el Zero crack.

Lector; ¿En serio? Hace semanas no respondes mis mensajes PM hijo de pu-

Zero: ¡Disfruten del capítulo!

Disculpen los errores ortográficos.

"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

############ Cambio de escenario o lugar.

Capítulo 47: Toph vs Azula…

El sol empezaba a elevarse a lo alto del cielo, dando el medio día.

Era un bonito día, que iba a ser arruinado por la tormenta que se asomaba en el horizonte, los relámpagos se podían ver a la distancia.

Aunque en un momento como este, el clima era el menor de sus preocupaciones.

Azula estaba tirada en el suelo, acaba de despertar, su expresión era sombría con marcas debajo de sus ojos, que aún estaban rojos, ella tenia sus manos y pies cubiertas de tierra, como su armadura.

"…" ella se quedó solo sentada, con una mirada vacía viendo las decenas de tumbas, todas ellas con piedras como sepultura, a excepción de una que tenía un garrote y una piedra, con un nombre inscrito en el.

'Yoko'

La princesa estuvo toda la tarde y noche, escavando y enterrando los restos que pudo recuperar, los maestros fuego carbonizaron los cuerpos, dejando solo sus cabezas.

Era lo menos que podía hacer, darles un descanso digno.

Levantándose, Azula se puso de pie, y miro sus manos, no se sentía mejor, sentía el asco y repudio, por si misma, por los soldados de su nación que hicieron esto.

Tragando su dolor y frustración, limpio las lágrimas que se asomaban por el borde de sus ojos, se puso de pie.

"Yo…" dando una última mirada a la tumba de la guerrera acorazada, busco las palabras para decir lo que sentía, "Lo siento…" se lamentó.

Apretando sus dientes y clavando sus uñas en sus manos, saco de su cinturón un cuchillo.

Se miro a si misma en el reflejo de la hoja, afilada y delgada, con su apretar un poco su pulgar contra el filo, ya la hizo sangrar.

La maestra fuego dejo de mirar el cuchillo, al mirar la persona que estaba ante ella, tuvo que bajar un poco la mirada, para encontrarse con sus ojos.

Una llegada inesperadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora