Capítulo 3

473 81 8
                                    

Música del capítulo:  "all i want - kodaline"

*-*-*

De alguna manera, Lan Wangji se encuentra en un pequeño y agradable restaurante sentado a la mesa con el hombre que estuvo evitando todo el día. El hombre le está sonriendo tan brillantemente que duele mirarlo. Debió de quedar deslumbrado por la sonrisa cuando aceptó acompañar al otro cultivador a cenar. Recuerda claramente que no quería ir, no recuerda haber dicho que sí. Tal vez no tuvo oportunidad.

"No digo que haya probado todos los restaurantes de la ciudad, pero estuve en muchos, y créeme cuando digo que éste es el mejor", dice el otro cultivador. Lan Wangji se pregunta de dónde viene toda su alegría y cómo cabe todo en su esbelto cuerpo.

"Gracias por cenar conmigo, Lan Zhan. Me emocioné mucho cuando supe que estabas en la ciudad". Lan Wangji no lo toma como algo personal. Esta persona parece que estaría igual de emocionada por recibir caramelos gratis.

"Mucha gente está interesada en el caso, ¿sabes? Algunos quieren solo sacarle vistas y seguidores, pero otros quieren ayudar".

Lan Wangji no entiende la parte de los seguidores, pero no pregunta. El hombre ya habla mucho sin que Lan Wangji lo aliente.

"Me reuní con algunos y los eché a todos. Eran inútiles, agitando sus medidores EMF y tableros Ouija y otras tonterías. No hay nada que puedan aportar al caso. Solo tendría que ocuparme de ellos. Tú eres diferente", añade un guiño a la afirmación.

Lan Wangji aprieta los dientes con tanta fuerza que le duele.

"Eres un verdadero activo, mi único igual".

A juzgar por su tono pretende ser halagador. No lo es. Lan Wangji es un cultivador inmortal, lleva casi dos mil años de caza nocturna. Este hombre, este joven de alguna manera tiene los poderes de un cultivador sin una secta o un maestro. Lan Wangji no sabe cómo alcanzó un nivel de cultivo tan avanzado, pero duda que haya sido a través del trabajo duro y el apego a una rutina.

Eso es lo que piensa mientras lo observa leer el menú y jugar sin pensar con la borla roja de su pendiente.

"¿Cómo te llamas?", le pregunta después de que una camarera les tome nota de los pedidos.

Él levanta la vista como si estuviera sorprendido por la pregunta.

"Um. Mo Xuanyu."

Es un nombre falso. Lan Wangji había escuchado suficientes nombres falsos en su vida como para reconocer la forma en que se desliza de manera poco natural de sus labios.

"¿Dónde aprendiste a cultivar? Ya no hay sectas, y no sé de nadie que haya tomado nuevos discípulos en siglos".

Mo Xuanyu se encoge de hombros. "Solo sé lo que hay que hacer".

Es la misma respuesta que dio en el lago. Lan Wangji siente una oleada de ira en su pecho. Es imposible que alguien cultive por su cuenta y llegue a esos niveles.

"No es así como funciona esto. Para poder usar la energía espiritual como tú lo hiciste, hay que cultivar durante años".

Mo Xuanyu inclina la cabeza. "¿Tal vez sí trabajé durante años? Estudio y medito, solo que no tengo a nadie que me diga cómo hacerlo".

Lan Wangji inhala profundamente. "Uno no se despierta simplemente y sabe cómo desterrar demonios".

Mo Xuanyu se ríe. Es fuerte y enerva a Lan Wangji.

"Es gracioso porque eso es exactamente lo que me pasó a mí", dice entre risas.

"¡Mo Xuanyu!"

Treinta y tres LatigazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora