Mi lindo gatito

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Descripción: Lo que piensa Perona de Zoro.
Autor: The Wandering Swordman
Descripción: https://m.fanfiction.net/s/9054928/1/My-Little-Kitten
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Perona estaba en su dormitorio privado y en su cama bellamente hecha. Era rosa, roja, negra, con un poco de blanco; el color que ella quiso durante mucho tiempo. Con las altas ventanas de su habitación, podía ver el sombrío paisaje de la isla Shikkearu. Ella suspiró de felicidad. Sí, Bartholomew Kuma le concedió su deseo; este era el lugar que imaginaba. Lo único que faltaba eran las lindas criaturas; ella no pensaba que los Humandrills fueran lindos.

Hoy, Dracule Mihawk regresó a casa de un largo viaje de cazar barcos de piratas débiles y recolectar recompensas, y Perona siempre estaba emocionada por eso. Ella molesto al maestro espadachín para que le comprara algo de tela, para que pudiera hacer un osito de peluche. Mihawk recordó su promesa, así que le entregó varias piezas de tela de colores.

Escogió el marrón claro, el azul y el blanco porque quería que el primero fuera similar a su antiguo sirviente Kumashi. Era una cosa tonta, torpe, estúpida, aburrida e inútil que nunca hacía nada bien, pero siempre se sentía triste cuando regresaban los recuerdos de Kumashi.

Perona tenía una caja de costura abierta (también molesto a Mihawk para conseguirla) y estaba cortando un largo trozo de hilo con los dientes cuando la puerta de su habitación se abrió de repente.

"¡Oye!" Perona gritó: "¡Cuántas veces tengo que decirte: llama antes de entrar en mi palacio!"

Zoro estaba en la puerta luciendo un poco aturdido. Ella sabía la razón: el día en que Mihawk llegó a casa, el idiota le pidió al maestro espadachín que peleara con él. Eso fue ayer por la mañana, por lo que los dos idiotas habían estado peleando durante más de un día. Además, estaba sangrando de la cabeza a los pies, así que fue todo un espectáculo.

"¡Oye! ¡Vas a manchar mi bonita alfombra!"

"¿Dónde está mi habitación?"

Perona gritó: "¿Por qué tengo que repetirme mil veces? Tu habitación está ..."

El espadachín no la escuchó o apenas estaba consciente para siquiera escucharla, pero comenzó a dirigirse hacia su cama. Perona empezó a gritar más fuerte porque estaba dejando huellas ensangrentadas por todo el suelo.

Cuando Zoro llegó al extremo de la cama de Perona, cerró los ojos y se dejó caer. Perona le gritó por última vez, pero el hombre no se movió. Fue un milagro que su cama fuera enorme o de lo contrario Zoro habría dormido sobre su tela nueva y agujas de coser.

"¡Genial! ¡Cómo voy a coser ahora contigo en mi cama! ¡Sal de mi cama!" Por supuesto, Zoro no se movió, así que Perona resopló y se cruzó de brazos. Quería permanecer enojada, para que cuando Zoro despertara pudiera verlo. Sin embargo, la respiración suave y constante del espadachín y cómo su espalda se levantó gentilmente la hicieron sonreír. Este hombre-idiota se quedara en este castillo durante dos años para entrenar y ayudar a su capitán idiota de nuevo. No imaginaba que el hombre fuera del tipo que haría algo por alguien.

Silenciosamente guardó su equipo de costura; ella podría hacer esto más tarde. Luego, fue a su armario para tomar una caja de medicinas para vestir a Zoro con vendas. Aunque Zoro decia que era una molestia y se las quitaba, lo hizo de todos modos. Principalmente era porque le gustaba molestar al espadachín, pero estaba realmente preocupada por el hombre. No es que alguna vez lo dijera en voz alta.

Perona dejó la caja al lado de Zoro y lentamente sacó unas tijeras y un rollo de vendas nuevas. Con el sonido de las tijeras, Zoro abrió los ojos.

"Nnrg, no quiero eso-"

"Cállate. ¡Viniste a mi habitación, así que tendrás que hacer todo lo que te diga!"

Zoro asintió dócilmente, lo cual no fue una sorpresa. Perona descubrió que un Zoro somnoliento era un Zoro obediente. Entonces, dijera lo que dijera Perona, Zoro lo haría. Además, el espadachín siempre cumplia sus promesa (¿eran todos los espadachines así?) Todas las promesas que ella le hizo mientras él tenía sueño, él las cumplió, pero a menudo se quejaba y discutía.

"Viniste a mi habitación mientras yo estaba haciendo un osito de peluche, así que tienes que compensarlo, tendrás que ayudarme a hacerlo".

"Bien."

"Tendrás que recortar la forma y coserla. Yo haré el relleno".

"Bien."

"¡Y hazme chocolate caliente con malvaviscos! ¡Quiero siete malvaviscos grandes!"

"Nnfm".

"Quiero una respuesta".

"... bien ..."

"¡Bien!" Perona sonrió mientras comenzaba a desabotonar la camisa de Zoro para encontrar algunos cortes y magulladuras. El hombre no se parecía a Kumashi, y definitivamente no era tan lindo, pero había algo adorable en el hombre que le estaba encariñando.

Era como un lindo gatito, muy adorable

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