Después de que Dick se fuera a los Teen Titans y se disolvieran, él rehace su vida con Starfire.
Batgirl sigue ayudando de vez en cuando a Batman y cuando no, hace pequeñas misiones por Metrópolis con su amiga Supergirl o está en su grupo con Huntre...
—Star, no es... —Dick intentó pronunciar algunas palabras mientras nuestras manos se separaban pero ella lo calló antes.
—¿No es verdad que al ir a Gotham te juntaste con ella? —mientras hablaba se acercaba a él— ¿No es verdad que al ir te acostaste con ella? ¡Sé que es tu ex! —dijo delante de él.
—Técnicamente no nos acostamos —dije mirando para otro lado. La gente que se iba se paró al escuchar gritos de parte de ella.
—Tú cállate que te tengo muchas ganas —me miró con ese odio con el que había mirado a Dick.
—Oye, págala conmigo no con ella —le agarró los hombros y ella se apartó.
Sus ojos se volvieron más verdes que antes.
—Ella tiene culpa. ¡Sabía que no era buena idea invitarla!
Sus manos empezaron a recobrar un verde igual a sus ojos, formando bolas de ese color, o poder. Nos apartamos de ella por seguridad. De sus manos lanzó un verde hacia nosotros, que quemó un trozo del árbol que había detrás nuestro, ya que nos apartamos a los lados.
—¡Star! ¡Calma! —dijo el pelinegro. La gente se acercó corriendo a intentar detenerla pero al ser supers se quedaron parados.
Los titans se acercaron.
—¡No le digas a una chica que se calme, Richard! ¡¿No has aprendido a tratarnos después de todo?! —volvió a lanzar una de esas bolas ardientes verdes hacia el mencionado pero él se apartó.
—¡Star! ¡Olvídate de ellos! Eres una superheroína y no haces esto... ¡Ignórales! —la chica de morado, Raven, intentó calmar a su amiga, que ahora su pelo estaba ardiendo.
—¡Vuelve! —el mitad robot, Cyborg, intentó calmarla también. Nosotros dos, como el resto de gente, mirábamos (sólo que Dick y yo temiendo por nuestra vida).
Su pelo dejó de arder mientras se miraba a sí misma con desprecio. Las manos volvieron al naranja de su piel y se abrazó a sí misma con miedo. Sus amigos fueron a abrazarla y llevársela de ahí.
—Ojalá podáis perdonarme algún día... —escuché decir de Dick a su ahora antiguo grupo de amigos.
—Se le pasará —una pequeña sonrisa del chico verde, Beast Boy, tranquilizó a Dick—. A todos.
...
Nos encontrábamos en una limusina de Bruce que había contratado para la boda de su hijo, toda la batfamilia y Selina, sin decir nada. La ventana con el chofer, Alfred, estaba abierta por si tenía que parar a calmar el ambiente. Casi todos nos miraban de reojo con sus brazos cruzados menos la gata.
—¿Vais a decir algo o vamos a estar así hasta que acabe el día? —dije, cansada de las miradas largas.
—Casi os mata una alienígena porque mi hijo le ha roto el corazón —dijo Bruce.
Damian y Jason se rieron por lo bajo.
—¿Algo que objetar? —miró furioso a sus hermanos Dick— A ti también te mata un alienígena varias veces y no por ello te echo la bronca —dijo ahora a su padre.
—Ahí tiene razón —dijo Selina a lo que Bruce la miró y levantó las manos.
—Menudo ambiente me has dejado —dijo Tim—. ¿Y tengo que ir con ellos mañana?
—Si quieres voy yo —dijo Jason en burla y Damian se rió.
—Bueno, basta ya —miró a Tim—. Ahora te toca a ti ser el líder, ¿vale? Sé que puedes hacerlo y no ponerme más mierda en ese grupo —suspiró y miró a su padre—. Nunca dejé de amar a Barbara y esta misión que TÚ nos hiciste colaborar me lo ha recordado. Star era un intento de olvidarla y no le iba a hacer más daño casándome con ella —soltó.
Le agarré la mano que tenía en su muslo y le sonreí.
—Si al señorito Dick le hace bien, ¿Qué más dará? Starfire se recuperará y encontrará a alguien que la haga feliz, señor Bruce —Alfred abrió la boca.
—Como sea —después de un rato me miró—. Al menos me alegra saber que puedo confiar en ti.
Le sonreí de vuelta.
...
La vida después de aquello fue diferente pero feliz. Dick había dejado a Nightwing un tiempo y ahora era Richard, detective y espía de Gotham. Mi padre había resuelto el problema de su piso y volvió a vivir allí. Nosotros vivíamos juntos, compartiendo aquel amor que tanto había ansiado. En fechas señaladas comíamos con mi padre o con Bruce. Yo seguía haciendo misiones con la batfamily, Supergirl, Black Canary y sola. Todo volvía a la normalidad y además lo tenía a él.
Tim consiguió que los titans perdonaran a Dick y, aunque Star seguía dolida, al menos si dignaba a hablar con nosotros a veces.
—¿Vienes? —lo estaba admirando desde detrás, a una distancia lejana.
Estábamos en la azotea en donde nos dimos nuestro primer beso. Él iba de Dick Grayson y yo de Barbara Gordon. Era de noche y él miraba las estrellas al final del lugar. Se giró para verme y su cara me hizo reír.
—Estás guapísima, como aquella noche. —se acercó a cogerme la mano y acercarme a donde antes estaba.
—¿Aún la recuerdas? —dije feliz por aquel recuerdo.
—Jamás la olvidé. —y como aquella vez nuestras respiraciones se unieron, así cerrando los ojos para ser besada por el amor de mi vida; Richard Grayson.
Narra Dick/Nightwing
Y así nos volvimos a unir, yo y el amor de mi vida; Barbara Gordon.
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T H E E N D :)
¡Hola a todxs! Primero que todo; muchas gracias por leer esta historia, por seguirla, votar, comentar... ¡Por estar ahí!
Por fin la he conseguido acabar y, aunque me parece un final muy cursi, me gusta el resultado. Espero que a vosotrxs igual. ^^
Estoy muy contenta por esto. Ha sido un honor escribir un fanfic sobre esta pareja que tanto me gusta.
Espero leernos en un futuro... Sólo puedo, o recomendarte otras historias de este shipp o mis propios fanfics.
