🔞"Todo por ti" [Gabenath]

8: Barcelona

Llegaron a la hermosa ciudad de Barcelona, las 2 feminas estaban asombradas por las edificaciones y el hermoso cielo nocturno. Al registrarse en el hotel se dieron cuenta de una cosa, la distribución de los cuartos, ya que solo habían 2 disponibles en todo el hotel debido al evento, de lo cual Nathalie hizo una sugerencia a su jefe.

- ¿Y si los chicos comparten una habitación y nosotros una?

Él abrió los ojos como platos sorprendido por las palabras de la mujer - ¿Adolescentes compartiendo la misma habitación? Ni de chiste

- Vamos Gabriel, son novios y tal vez deberían estar juntos

- ¿Recuerdas lo que estuvo por pasar el otro día en el camerino? 

- Pero vamos, ya hablaste con Adrien y creo que él es consciente de que no es momento para eso ¿No lo crees?

Suspiró - Está bien, pero si los notó extraño cambiarán de cuarto

- Ok, además como tu y yo ya hemos dormido en el mismo cuarto no le veo ningún problema

El diseñador simplemente sonrió y se instalaron. Ambos adultos al entrar al cuarto él no pudo evitar tomar a su asistente de la cintura y recargarla en una pared cercana.

- ¿Qué estás... - No la dejó seguir hablando ya que la besó con deseo cosa que ella aceptó sin dudas

De pronto el hombre bajó una de sus manos hasta la intimidad de ella y comenzó a tocarla con ímpetu, está emitió un jadeo de sorpresa seguido de un gemido de placer absoluto. Al tener falda le fue mucho más fácil para el rubio mayor hacer a un lado la ropa interior y tocarla directamente, también se atrevió a besar su cuello, acelerar el ritmo de sus atenciones y masajear uno de sus pechos por encima de la ropa. Poco después llegó al clímax, se miraron a los ojos con lujuria para después separarse y acomodar sus ropas, esa fue la primera vez que habían hecho eso y no se arrepentian para nada.

Nathalie aclaró su garganta para preguntar: - ¿Y eso por qué fue?

- Lo lamento, no lo pude evitar, se que no deberíamos...

- Descuida, no te preocupes de hecho me gustó

- No lo volveré a repetir, ¿Ok?

Dudó un poco su respuesta, pero al final asintió a su pregunta.

[...]

Poco después, se reunieron para cenar en el restaurante. Adrien y Marinette parecían estar molestos por algo cosa que intrigó un poco a Gabriel quien al terminar de comer quiso hablar con su hijo acerca de eso.

- ¿Tuvieron una discusión, hijo?

El rubio suspiró - Si, pero no te preocupes que más tarde voy a hablar con ella y aclarar las cosas, fue por una tontería de mi parte y como sueles decirme "Un Agreste no deja nada para después"

- Exacto, estoy seguro que solucionaran las cosas

- Gracias. Cambiando de tema, no creí que accederias a que Marinette y yo compartieramos habitación ya que... tu sabes

- Pues te diré que no estaba cien por ciento de acuerdo, pero Nathalie me convenció de que tu estás conciente de que no es tiempo para dar "el siguiente paso" con tu novia

- Cierto, eso lo hablamos ayer y vamos a esperar el momento adecuado, la "charla" me hizo darme cuenta de muchas cosas. Por cierto, ¿A Nathalie no le importó que duerman en la misma habitación, digo, solo hay una cama y... Oh lo siento, no debo de meterme en eso

- Se que te interesa saber acerca de mi relación con ella y solo te diré que solo es amistosa y laboral, aunque... bueno dejaremos está charla hasta aquí, ahora ve a tu alcoba y habla de una vez con Marinette, Nathalie y yo debemos dormimos ya porque tenemos que estar en la agencia muy temprano

- Entiendo, descansa papá, buenas noches

- Igualmente hijo, descansa

Gabriel subió hasta su cuarto. Nathalie estaba hablando por teléfono y ni siquiera se había dado cuenta de que detrás de ella estaba su jefe interesado por su llamada.

- Si lo se, pero te prometo que en cuanto llegue a París te busco ¿Está bien?... se que estás ansioso por verme y no te culpo, lo que pasó la otra vez fue increíble y créeme si te digo que mw gustaría repetirlo. En fin debo colgar, te veré después, adiós, Jean - Y colgó - Se dio la media vuelta y se percató de la presencia de su compañero de habitación - Oh Gabriel ¿Cuánto escuchaste?

- No mucho ¿Quién es Jean y por qué quieres repetir lo de la otra vez y qué es eso que hicieron exactamente? 

- Jean es un amigo que conocí hace 5 años, hace poco volvimos a hablar luego de que volvió de Alemania dónde vivió todo este tiempo. Hace 2 semanas cuando me diste el día libre salí con él para comer en si restaurante favorito

- Aja ¿Y no hicieron nada más esa vez, no fueron a otro lugar?

Arqueo una ceja - ¿Acaso estás... celoso?

- ¿Celoso yo? No ¿Por qué debería? Tu y yo solo somos...

Eso la molestó - Oh ya veo ¿Tu y yo solo somos jefe y asistente que debes en cuando se besan y se tocan? 

- Eso es lo que somos, somos jefe y asistente que solamente comparten habitación y que actuan como unos  adolescentes hormonales - Se dió cuenta de como lo dijo - lo lamento, no quise decirlo así

- Pero lo dijiste, ahora entiendo que esto de pedir compartir cuarto contigo no fue una muy buena idea

- Nathalie... - Intentó tomarla de la muñeca, pero está se lo impidió - No digas eso, dormir a tu lado es de las mejores cosas que la vida de ha dado, y si, se que solo ha pasado una vez y que no llegó a más por obvias razones, pero confieso que dormir a tu lado me pareció sumamente bello, verte dormir tan plácidamente me parece muy lindo, hasta admito que tus ronquidos son adorables - Ambos rieron por esas palabras - A lo que quiero llegar es que tal vez lo que estemos haciendo es por una razón

- ¿Y esa es...

- Que ambos nos sentimos atraídos por el otro, ya sea físicamente o por nuestras formas de ser, tu sabes perfectamente que te admiro demasiado - Acarició su mejilla con ternura y delicadeza para después pasar su naríz por el cuello de la mujer provocándole que se estremeciera ante aquel inesperado contacto - ¿Me vas a negar que no te mueres porque te bese, toque y te recueste en esta cama para hacerte mía una y otra vez?

La fémina estaba a punto de dejarse llevar, pero su conciencia le advirtió que no podía caer a la tentación, así que rápidamente empujó al diseñador - No soy un método para quitarte el estrés, Gabriel Agreste, si crees que voy a ceder a tus encantos estás muy equivocado. Como tu dijiste, parecemos unos adolescentes hormonales que no pueden quedarse quietos ni un segundo, será mejor que durmamos ya, debemos despertarnos temprano para ir a la agencia. Antes me daré una ducha, SOLA - Tomó ropa de un cajón y se encerró en el baño

Tenía muy claro que sí lo deseaba, quería que le hiciera el amor, pero su actitud cada vez lo confundía más ¿De verdad lo que dijo era de corazón o solo la estaba utilizando? Si bien que había dicho que no quería serle infiel a su esposa se notaba que también deseaba de alguna forma "regresar" a su vida sexual ahora con ella, siendo como un "remplazo" de Emilie. No quería caer a las enormes ganas de estar con él y no solo por deseo sino también por amor. Aquella semana en Barcelona sería importante para ver su evolución, que sería de ellos estos días.

Una dura prueba para ambos adultos que estaban dispuestos a enfrentar sea como sea.