Letter for you.

6.

6. Jeongin.

Una vez me dijeron que era mejor aprovechar las oportunidades que te daba la vida. No se si esta oportunidad sea la mejor para mi.

- Entonces, tenemos que pensar en una actividad para el festejo de febrero.

La dichosa fiesta del día de los enamorados. ¿Porque a todos les gustaba? No lo entendia del todo, o quizá estoy amargado porque se que quien me gusta ya tiene novio.

Muchos de mis compañeros dieron ideas, tantas de ellas, que me maree un poco. Hasta que dijero esa en específico.

- Podríamos hacer un buzón de amor.

Muchos comenzaron a murmurar sobre ello, en si y a lo que entendí, se trataba de ir por los salones, recolectando cualquier carta que se fuera a entregar, colocando en ella el nombre del destinatario y el grado al que iba. Parecía la oportunidad perfecta para mi, dios, si hasta estaba escribiendo ya una carta.

Suspiré cuando nuestro maestro selecciono esa actividad para proponerla en el consejo estudiantil, si la seleccionaban, entonces algunos de nuestro salón tendrían que ser los carteros que las entregarían y recibirían.

Y tampoco parecía como si lo hubieran pensado mucho, porque un par de días después, el anuncio sobre ello estaba en el tablero. "¿Quieres confesarte? ¡Hazlo sin miedo, tú puedes hacerlo! Y si no crees, puedes confiar en nosotros. Este 14 de febrero, escribe una carta o envia un regalo a tú enamorado, puedes ser anónimo, pero no te rindas nunca. ¡Esperamos su valentía, luchen por su amor!"

- Ridículo. ¿Quién rayos se atrevería a hacer eso? - escuche la voz de Seungmin de fondo, con la risa de Hyunjin poco después.

- Cariño, que tú seas insensible y no quieras escribirme una carta profesando tú amor por mi, no quiere decir que los demás no quieran.

- Sigue hablando, Jin. Sigue hablando. - y se alejo de ese alboroto, con mi mejor amigo siguiéndolo de cerca.

Si lo pensaba bien, podría escribir una buena carta, seria anónimo ¿no? Podría escribirla y al final no mandarla.

Así seria como Lara Jean, confesando mi gran amor por ti a un papel el cual quedará en el fondo de mi armario, siendo olvidada allí. Quizá sería bueno, para dejar de sentir este amor por ti.