La cercanía entre Louis y Harry se intensificó aún más con el paso de los años.
Louis prácticamente vivía en el apartamento del mayor y su ropa estaba apilada en tres cajones del ropero de la habitación principal. Además de parecerle cómodo, Louis aprovechaba su estadía en la vivienda para llegar más temprano a la universidad.
El menor estaba en su último año y entre las prácticas y el servicio social, apenas le daba tiempo para depositar un beso en las frentes de sus retoños, quienes, hace apenas tres semanas habían entrado a preescolar y él no podía estar más orgulloso, muy al contrario de Harry, quien no disimuló su llanto en la entrada del jardín de infantes.
—¡Pero yo no quiero que se vayan, Louis! —el grito desesperanzador de Harry captó la atención del resto de los padres que se encontraban haciendo la misma acción que la pareja.
Louis abrazó a Harry y le empezó a reconfortar, sin embargo, el gesto se vio interrumpido cuando Luke corrió a la , ahora cerrada, rejilla, gritando.
—¡Papi, sácame de aquí! —las manitas de Luke estaban agarradas fuertemente a la barandilla.
Cuando Harry escuchó la voz de su bebé, rompió el abrazo de Louis y con fuerza, lo aventó hacia un lado, fue hasta donde su pequeño hijo y se arrodilló.
—Y-Yo lo haré —le dio una sonrisa a su bebé.
—Pero por supuesto que no —negó Louis.— Vámonos, Harry, mis hijos tienen que aprender.
—¿Tus hijos?, te recuerdo que fui yo quien los cargó por nueve meses —Harry cruzó sus brazos sobre su pecho, alzando su ceja derecha.
—¿Es usted su madre? —la educadora irrumpió.— Por un momento pensé que era el abuelo de los gemelos. ¡Jessie! Corrige en la nota de contacto la información del señor Styles.
La carcajada de Louis hizo eco en el pequeño espacio, agarrando su estómago.
—Dios mío, ¿abuelo? Esa es nueva.
Las mejillas de Harry se encontraban torneadas de carmesí.
—¿Quién se cree esta?
Louis negó y nuevamente abrazó a Harry, dándole palmadas en su espalda. —Tranquilo, no te enojes porque podría subir tu presión.
Harry lo empujó —Tú también eres un imbécil.
El mayor intentó olvidar por un momento el momento bochornoso que vivió con la ignorancia de la educadora buscando a su Luke pero entre el percance y la equívoca información, el lugar ya se encontraba solo, con todos los niños en su respectivo salón.
Oh, de seguro su pequeño demonio estaba llorando desconsoladamente en su salón.
—Siento algo en mi pecho, como si me hubieran arrebatado una parte de mi que ahora está en esas cuatro paredes, no sé si pueda sobrevivir a esta tristeza que nubla mis ojos, quiero llorar, los extraño, Louis. —confesó Harry.
Louis lo entendió. —Amor, solo serán cuatro horas.
Harry suspira, resignándose a esta nueva etapa. —Lo sé.
El menor le sonríe y se acerca a él. —Ve el lado bueno de todo esto; Luke y Louis aprenderán muchas cosas y yo te follaré toda la mañana para quitarte esta tristeza.
Harry abrió su boca, sorprendido.
—¡Eres un asqueroso! —El ojiverde se fue de ahí, pisando fuerte y Louis solo pensó que la mañana sería beneficiosa para ambos.
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Baby. I'll never leave if you keep holding me this way. |LS|
Fiksi Penggemar¿Es ilegal cuando te embarazas de un, (literalmente) niño sin experiencia alguna? Harry, un hombre poco profesional a caído en lo que sería su tan esperado destino. ¡Pero vamos! ¿Diecisiete años? Estaba jodido.
