Forzado a Casarse con él Príncipe Enemigo

Capítulo 34

Desde que nació Xian Sheng nunca había tratado con personas como Zhan Zhen. Si quisiera elegir a un hombre desvergonzado en su vida, Zhan Zhen sería definitivamente la primera opción.

Se fueron temprano y estaban regresando a casa. Pronto, Zhan Yin se acercó a ellos y les preguntó si querían salir a comer barbacoa. Los jóvenes siempre prefieren juntarse a jugar, para no comer demasiado en la cena de Año nuevo, después de acompañar decentemente a los mayores irán a divertirse.

Zhan Zhen pidió su opinión. Xian Sheng realmente quería ir. Todavía no había comido barbacoa y mucho había salido por la noche.

Pero cuando pensó que Qi Sile estaría allí, dejó de pensar en ello, temía que Qi Sile le dijera algo a Zhan Zhen.

Dijo que era su ShiXiong, pero al final no había amistad y surgieron sospechas, naturalmente se inclinaría al lado de Zhan Zhen.

Zhan Zhen no lo obligó, aunque estaba animado afuera, el clima todavía era frío y se preocupaba por la salud de Xian Sheng .

"Entonces no iremos". Respondió Zhan Zhen. Zhan Yin estaba muy decepcionada, dio media vuelta y se fue, dio tres pasos, se dio la vuelta y de mala gana dijo: "Cuñada, entonces no te olvides de ir a bañarnos el quinto día del año".

Recordando eso, Xian Sheng volvió a quedarse sin aliento y respondió amablemente: "Regresa temprano al palacio, no preocupes a la Emperatriz".

Zhan Yin sonrió felizmente debido a su consideración, asintió con fuerza y ​​salió corriendo feliz.

Zhan Zhen y él se quedaron en la habitación callados por un tiempo. Los ojos del hombre se posaron en él, enarcó las cejas y le preguntó: "¿Estás pensando en ir a bañarte con ella?"

Aunque Zhan Zhen no parecía decir nada, Xian Sheng estaba temblando en su corazón. Un hombre fue a bañarse con su hermana, cómo se escuchaba eso.

Se puso de pie casualmente, caminó hacia el espejo de bronce y tomó asiento, levantó la mano para quitarse los accesorios del cabello y explicó: "La Emperatriz dijo que rociarían agua bendita en el baño el quinto día del año, así que dijo que debería ir a bañarme un poco, como bendición".

Zhan Zhen se levantó, caminó hacia él, luego se inclinó y lo miró a través del espejo de bronce. Xian Sheng levantó la mirada y lo miró. Levantó la mano y lo ayudó a quitarse los accesorios mientras miraba el espejo de bronce. Dijo pensativo: "Ni siquiera yo me he bañado contigo".

"No gozo de buena salud, me preocupa desmayarme en el baño... En realidad, no quiero ir".

Cuando Zhan Zhen estaba presente en el pasado, daba la sensación a la gente de que era indestructible. Detrás de él en este momento, Xian Sheng de repente sintió como si hubiera una gran roca sobre su cabeza, estresandolo. Todavía piensa que Zhan Zhen debe sospechar, pero tal vez ... no está listo para descubrir la verdad. Después de todo, en su corazón, espera haberse casado con una mujer.

Zhan Zhen no podía saber lo que estaba pensando y dijo casualmente: "Ya que es una invitación de la Emperatriz, es inapropiado no ir".

Xian Sheng estaba pensando cómo lidiar con eso. No importa cuanto pensó, no podía escapar esta vez, cuando de repente una mano rodeó su cintura, Xian Sheng fue levantado de nuevo y llevado a la cama.

Zhan Zhen lo beso naturalmente, en sus ojos se podía ver interés, preguntándose si estaba sustandolo deliberadamente: "Esta bien, no quieres mostrarmelo, pero mi madre le echara un vistazo, ¿qué estás escondiendo...?"

Efectivamente, todavía lo recordaba, pensó Xian Sheng, tomando la iniciativa de besarlo dijo: "¿Mi esposo no quiere vendarse los ojos?"

Cuando menciono sobre vendar los ojos, la mirada de Zhan Zhen se oscureció.