"¡Gran Maestro! ¡Hanguang-Jun y el Patriarca de Yiling están peleando otra vez!"
Era ya la décima vez que eso pasaba en el día.
En Gusu una mañana normal no podía comenzar sin una pelea o elogios a más no poder por parte de esos dos que lograban s...
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- Zhan, vámonos Ya. - Yibo tiraba del brazo del otro tratando de llevarlo a un lugar seguro.
- Pero ¿Y si lo lastimé? - Pobre alma pura de Xiao Zhan. Estaba preocupado por haber golpeado a Wen Chao. ... Era el malo de la historia. ¡Pero a él no le había hecho nada! Y He Peng le caía bien.
- Esa cosa ni sentimientos tiene. - trató de convencerlo nuevamente mientras lograban llegar al salón principal donde Yanli se encontraba.
-A-Xian.. Están bien. - La chica se acercó a los dos recién llegados. ¿Que hacía Yanli sola en ese lugar? Aún se escuchaban gritos y alboroto fuera, el choque metálico de las espadas tampoco faltaba, sin duda era una gran ayuda que el clan Lan estuviera ahí...
Zhan a lo lejos escuchó la voz de Jiang Cheng, se asomó por la puerta pero una espada se clavó justo en la pared al lado de tu rostro.
Necesitaba decirle con urgencia que por ningún motivo debía separarse de sus padres.
Ver la batalla en vivo era mucho más estresante que tener que aprenderse los diálogos. Volvió dentro y tomó a Suibian fuertemente, para después mirar directo a Wang Yibo, quien ya exigía una explicación con la mirada.
-Quédate aquí y cuida a Jie. - Le dijo tratando de hacer su papel de mayor, cosa que no funcionó, porque el de blanco sujetó su mano y forcejeó para que no avanzara.
-No se que estas planeando, pero no. - Yibo luchaba internamente por parecerse a Lan Wangji, pero en estas situaciones no había mucho que hacer, sabía que Zhan estaba a punto de cometer una locura.
-Yibo... - Susurró regañando el de negro. Al final suspiró mirando hacia el techo. - Bien, no iré... - Se rindió y sintió como la presión del agarre disminuía, a la vez que Yibo se daba la vuelta para regresar al centro de la habitación.
Ese fue el momento perfecto que encontró Zhan para tomar un mantel, arrojarlo sobre Yibo y escapar durante la confusión. "¿Verdad que te engañe?" Pensó el de negro mientras corría a toda velocidad esquivando golpes y a otras personas.
....
Decir que Yibo estaba molesto era poco.
¡Estaba furioso! Caminaba en círculos tratando de leer que pasaba por la mente de Xiao Zhan en esos momentos. Mira que arriesgarse tanto en una historia en la que tiene una muerte dolorosa...
- Maestro Lan... - Wen Ning y su hermana acababan de llegar a la habitación, lograron pasar silenciosamente entre toda la pelea, y era justo en el momento perfecto.
Miró a los dos recién llegados, y le dió una mala mirada al cachorro blanco que le había quitado la atención de su Zhan Ge hace un rato.
-Quédense aquí. - Dijo fuerte para que todos lo escucharán, y después salió corriendo a buscar al loco que tenía por compañero.
